El serbio Novak Djokovic, tercera raqueta del mundo, ganó el domingo su séptimo título de Wimbledon y el 21º Grand Slam de su carrera al imponerse en la final a Nick Kyrgios por 4-6, 6-3, 6-4, 7-6 (7/3).
Djokovic, de 35 años, tardó tres horas en derrotar al controvertido australiano, 40º del mundo, en la pista central del All England Club londinense, donde levantó el trofeo por cuarta vez consecutiva desde 2018 (el torneo se canceló en 2020 debido a la pandemia).
Con esta victoria, el serbio se queda solo una por detrás de Rafael Nadal, que tras ganar este año el Abierto de Australia y su 14º Roland Garros, cuenta ya con 22 títulos de Grand Slam.
Se queda también a un solo título de igualar el récord de ocho trofeos de Wimbledon, en manos del suizo Roger Federer.
¿PAGARÁ LA CENA?
Antes de la final, Novak Djokovic y Nick Kyrgios acordaron ir a cenar en un restaurante y el vencedor pagará la cuenta, según un intercambio de mensajes entre ambos en Instagram antes del epílogo del torneo.
El australiano y el serbio no han estado siempre en tan buenos términos: "Te han hecho falta cinco años para decir algo bueno sobre mí", bromeó Djokovic en la red social.
"Es verdad, pero te defendí cuando importaba", respondió Kyrgios, uno de los pocos jugadores en haber apoyado públicamente a "Nole" cuando no quiso vacunarse y fue por tanto excluido del Open de Australia, a principios de 2022, tras dos semanas de polémica.
"Lo hiciste y lo aprecio", replicó Djokovic. "¿Entonces somos amigos ahora?", devolvió el australiano. "Si me invitas a beber algo o a cenar, acepto. Y el vencedor (de la final) pagará", concluyó el serbio.
"Trato hecho. Vayamos a un club nocturno y volvámonos locos", propuso Kyrgios, en una posible alusión a una foto de Djokovic en Belgrado, con el torso desnudo, en una discoteca en junio de 2020, en plena pandemia del coronavirus.