Las cifras de pérdidas mortales sigue en incremento mientras el ejército israelí pidió que 1.1 millones de habitantes en Gaza evacúen y se movilicen hacia el sur.
Dos naciones que desde el siglo XIX se encuentran entre la pólvora y la sangre de miles de civiles, en medio de un conflicto que persiste en el tiempo sin saber cuándo culminará.