La delincuencia sigue demostrando que no tiene escrúpulos para cometer sus fechorías. Esta vez el blanco fue una ambulancia de la Cruz Roja de la Junta Provincial del Azuay. Los paramédicos atendían una emergencia, entonces el antisocial aprovechó para delinquir.
El hecho fue reportado por el medio Crónica Cuenca, en un informe subido el miércoles 17 de agosto. Todo empezó cuando el personal fue alertado por el ECU 911 de que una mujer necesitaba asistencia médica en la calle Carlos Brito, de la capital azuaya.
Los paramédicos llegaron al punto, pero había un camión que interrumpió el paso, por lo que decidieron dejar la ambulancia atrás y caminar hasta la casa de la mujer solicitante de ayuda.
Es ahí cuando un ladrón aprovechó que el personal de rescate estaba en el interior del domicilio, para robar. “El paramédico bajó hacer la atención, yo tuve que bajar la camilla para lograr traer al paciente hacia la ambulancia”, relató el chofer.
Moradores del sector se percataron de que un sospechoso entró a la ambulancia y alertaron al personal de la Cruz Roja.
El conductor del vehículo de emergencia salió a verificar y encontró la puerta abierta, el tablero de los mandos de las luces y la sirena destruídos. Además, la pantalla de la radio base de comunicación fue sustraída.
“En cuestión de unos tres minutos, alertan al conductor, informando que hay una persona dentro de la unidad. Salieron los compañeros y esta persona huyó del lugar”, contó Cristian Astudillo, presidente de la institución.
Agregó: “Nos deja inhabilitada una unidad, la cual sirve muchísimo para la atención de la ciudadanía”.
Además, el chofer de la ambulancia hizo un llamado a la Policía para realizar controles rigurosos en este sector de Cuenca y que los agentes de tránsito controlen a los autos que interrumpen el paso.
Tras este robo, la ambulancia quedó fuera de servicio mientras se solventa el inconveniente.