Hace varias semanas, VISTAZO reseñó que algunas personas acudían a los puntos de vacunación contra el covid-19, con certificados en los que se exigía el uso de una fórmula determinada. Ahora que la Fase 2 del plan 9/100 contempla la inoculación de personas de 49 a 16 años con enfermedades crónicas, La Hora denunció que se venden certificados que “prueban” todo tipo de condiciones de salud.
De acuerdo con el medio antes citado, la Coordinación Zonal 3 de Salud (Chimborazo, Cotopaxi, Pastaza y Tungurahua) ha reconocido que se reciben denuncias por este tipo de irregularidades. En estos casos, las autoridades han solicitado al personal de salud que atiende en los puntos de vacunación, que verifiquen la autenticidad de los certificados.
Por ejemplo, una mujer que labora como comerciante en Tungurahua indicó que ella adquirió un certificado que la catalogaba como una paciente con hipertensión (enfermedad crónica). Por 45 dólares y sin tener la condición preexistente, ella compró el documento y ahora ya está vacunada.
“La verdad es que necesariamente tenía que acceder a esa vacuna por mi trabajo”, comentó la comerciante, que viaja regularmente a la ciudad de Guayaquil y teme contagiarse en el camino.
CONTROLES MÁS ESTRICTOS
El requisito que exige el Ministerio de Salud Pública (MSP) para vacunar a las personas que presentan certificados de enfermedades crónicas, es que estén avalados por el mismo Ministerio de Salud, el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), el Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas del Ecuador (ISSFA) o el Instituto De Seguridad De La Policía Nacional (ISSPOL).
Sin embargo, de acuerdo con La Hora, en los puntos de vacunación no existe mayor filtro para verificar la autenticidad y validez de los documentos. Los especialistas están verdaderamente preocupados por la falta de ética de profesionales de la salud al firmar documentos falsos.
El presidente del Colegio de Médicos de Tungurahua, Patricio Mayorga, le dijo al portal que los certificados que el MSP valide deberían contar con la documentación, historia clínica del paciente y más.
AUSENTISMO
La socióloga Natalie Sierra, consultada por La Hora, señaló que la emisión de certificados falsos obedece a una serie de condiciones sociales y personales infundadas por el miedo a contagiarse.
“Esto hace que las personas, cuando ven una posibilidad de acceder a una vacuna, busquen transgredir las normas”, comentó.
Muchas de las personas que estuvieron o están programadas para las fases piloto y 1, no conforman parte de la población económicamente activa (PEA) del país, que salen todos los días de sus hogares y corren el riesgo de contagiarse y contagiar a los demás. De acuerdo con el INEC, la PEA abarca a las personas de 15 a 65 años (edad de jubilación media), que el plan de vacunación regular recién empezó a tomar en consideración con la Fase 2 (de 61 a 50 años).
Mientras tanto, en los centros de vacunación se evidencian dos tipos de ausentismo: Algunos registran ciudadanos que acuden a inocularse solo en el día a pesar de que el horario se extiende hasta la tarde; y otros que no acuden en la fecha asignada sino el fin de semana, y dificultan el proceso de inmunización.
El MSP indicó que, durante la última semana de la Fase 1, se registró un 30% de ausentismo de personas mayores de 80 años, 25% mayores de 65 años; 20% en el rango de 65 años y un 10%, de ciudadanos de 64 años.
La ministra de Salud, Ximena Garzón, ha asegurado que al menos 4 de cada 10 personas que ya tienen cita no quieren vacunarse. La funcionaria indicó que actualmente se estudian cuáles son las coordinaciones zonales con mayor demanda para saber en dónde se puede ampliar el rango etario de vacunación, es decir, convocar a personas más jóvenes.
Por el momento, el 75 % de la población adulta mayor a escala global ya está vacunada.