La Contraloría General del Estado (CGE) glosó por casi un millón de dólares a funcionarios que no impusieron multas a los contratistas de los proyectos para el manejo y protección de quebradas y para la dotación de agua potable y alcantarillado en Quito.
En dos informes de auditoría, que analizaron las operaciones efectuadas entre 2016 y 2020 en la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Alcantarillado (Epmaps), el organismo de control identificó pérdidas económicas para la entidad por la falta de aplicación de las sanciones a los contratistas que no incorporaron el personal técnico mínimo en las obras.
Los hallazgos derivaron en la confirmación de responsabilidades civiles por el monto de las mutas no impuestas, $ 992.490. Las glosas se determinaron contra los administradores y fiscalizadores de la ejecución de los proyectos y para dos proveedores de la Epmaps, por infringir los términos contractuales.
En los contratos para la construcción de los interceptores de la quebrada Caupicho y del sistema de agua potable y alcantarillado del Mercado Mayorista se estableció la necesidad de contar con dos ingenieros civiles, que asuman las funciones de superintendentes y residentes de las obras, pero las constructoras no emplearon el número de profesionales acordado.
El monto de las glosas corresponde al valor de las multas no cobradas por los 233 y 240 días que los profesionales no participaron en las intervenciones en la quebrada y en el mercado, respectivamente.
Auditoría determinó los incumplimientos luego de analizar los pagos efectuados al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Iess), los certificados emitidos por las contratistas, los libros de obra y las planillas de pago.
La falta de control ocasionó que los trabajos se ejecuten sin la participación de personal con capacidad e idoneidad técnica suficiente en la ejecución de las obras, conforme las especificaciones técnicas, estudios y diseños, según la CGE.