El periodista Patricio Aguilar, director del periódico 'El Libertador' en Esmeraldas, fue asesinado a tiros este martes 4 de marzo, informó Fundamedios (Fundación Andina para la Observación y Estudio de Medios).
El crimen ocurrió alrededor de las 17h00 dentro de una vivienda, luego de que un hombre lo contactara bajo el pretexto de realizar una cobertura periodística.
El diario Lucero, de Esmeraldas, agregó que el Aguilar fue atacado mientras acudía a cubrir un hecho noticioso en el barrio 'Fundo Limón", del municipio de Quinindé.
Informes preliminares señalan que recibió más de diez disparos. Hasta el momento, no hay detenidos.
Aguilar tenía una larga trayectoria y, además de director del periódico comunitario 'El Libertador' de Quinindé, se desempeñó como corresponsal de dos medios impresos de Guayaquil, en la provincia del Guayas.
El comunicador investigaba una reciente balacera en la zona y, horas antes, había denunciado en redes sociales la creciente inseguridad y delincuencia que azotan el sector.
Fundamedios expresó su solidaridad con los familiares y exigió a las autoridades esclarecer los hechos.
En enero pasado, los ecuatorianos enfrentaron el inicio de año más violento jamás registrado.
Según cifras del Ministerio del Interior, en enero de 2025 se registraron 781 homicidios, 276 más que los 505 registrados en 2024, y 247 más que los 534 de 2023, año en el que Ecuador se situó a la cabeza en el índice de muertes violentas de Latinoamérica.
El número de asesinatos de enero de 2025 también es el más alto desde que asumió el poder en noviembre de 2023 el presidente Daniel Noboa.
Para enfrentar a estos grupos delictivos, dedicados principalmente al narcotráfico, las extorsiones y la minería ilegal, entre otras actividades ilícitas, Noboa ha decretado sucesivos estados de excepción para incorporar a las Fuerzas Armadas al combate contra la criminalidad, incluida la militarización de cárceles controladas por estas bandas criminales.
Las estadísticas oficiales señalan que las muertes violentas cayeron a 387 en febrero de 2024, pero los homicidios volvieron poco a poco a subir con el transcurso de los meses hasta pasar los 600 en junio y los 700 en diciembre, pese al estado de excepción que persiste en las provincias con mayor índice delictivo del país.