Según recoge el medio Daily NK, radicado en Seúl (Corea del Sur) pero que informa sobre varios aspectos de la sociedad norcoreana a partir de una red de informantes, una vecina fue quien alertó a las autoridades sobre el hecho.
Las jóvenes habían desconectado el sistema de bloqueo de canales extranjeros de su TV para observar las series, lo que implica un desacato a las leyes del país asiático.
Tras el aviso, efectivos del régimen allanaron la casa y comprobaron que, en efecto, el mecanismo de censura no estaba activado y que las jóvenes habían consumido el material de manera discreta.
El arresto de ambas por parte del Ministerio de Seguridad se produjo en diciembre del año pasado. Tras meses privadas de libertad, las mujeres fueron ejecutadas públicamente en el poblado donde vivían, a inicios de este mes de junio.
Los oficiales que se dirigieron a quienes presenciaron el acto dijeron que "las dos se volvieron cercanas por su ideología corrompida y discutían sobre su curiosidad por Corea del Sur y el resto del mundo", según reveló una fuente protegida al medio referido.
"La mayoría de la gente que estaba en el punto de ejecución estaban sorprendidos cuando los oficiales del Ministerio señalaron que las muertes estaban destinadas a recordar al público que romper el sistema de bloquea para escuchar la radio o ver la televisión es un crimen de Estado", informó el testigo que se contactó con el NK Daily.