El 12 de noviembre, un trabajador de la playa en Key Biscayne, una isla situada al este de Miami, en Estados Unidos, descubrió una cabeza humana en la costa.
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Después de varias investigaciones, las autoridades confirmaron que los restos pertenecían a Víctor Enrique Castañeda Jr., un joven de 19 años que desapareció en las aguas de Miami Beach tres días antes.
Víctor se lanzó al mar para intentar salvar a su hermana menor de una peligrosa corriente de resaca. Él desapareció entre la marea, pero su hermana sobrevivió al ser auxiliada por un transeúnte que también saltó al agua al observar lo que ocurría.
El hallazgo de la cabeza puso fin a esfuerzos de búsqueda emprendidos por la Guardia Costera de Estados Unidos e impactó profundamente a sus seres queridos y a la comunidad local, que seguía de cerca el mediático caso de extravío.
El centro forense del condado de Miami-Dade confirmó el viernes pasado que los restos humanos pertenecían a Castañeda. No obstante, aún no se determina oficialmente la causa de su muerte. Se presume que, tras ahogarse, fue atacado por un animal.
Este sábado, amigos y familiares de Víctor Enrique se reunieron en la playa South Point, el lugar donde ocurrió el trágico suceso, para rendirle un emotivo homenaje. Dos botes de bomberos del condado de Miami-Dade realizaron un espectáculo de cañones de agua su honor.
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“Ver a tantas personas que vinieron a mostrar su apoyo, a unirse a nosotros en su honor, es algo que mi hermano hubiera amado”, dijo su hermana Chloe al medio local WBFS-TV., vistiendo una camiseta en la que se leía "por siempre 19".
"Siempre fue una persona increíble, generosa, que hacía sentir bien a todos los que lo conocían", agregó Jessica, otra de sus hermanas.