Cabo Verde, un destino turístico conocido por sus paradisíacas playas, se enfrenta a una crisis sanitaria sin precedentes, pues casi mil turistas han reportado haber contraído un misterioso virus estomacal durante su estancia en este archipiélago africano, lo que ha devenido en una oleada de acciones legales contra los hoteles.
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Desde 2021, un total de 926 personas han presentado quejas, afirmando que sufrieron síntomas similares de enfermedades gastrointestinales, convirtiendo lo que debería haber sido una escapada de lujo en "vacaciones del infierno".
Según el medio británico The Telegraph, entre las infecciones reportadas se encuentran Shigella y Salmonella, que han dejado a muchos turistas postrados en sus habitaciones durante días.
Un caso representativo es el de Cordelia Plummer e Ian Waller, una pareja de Birmingham y Kingston-Upon-Hull, quienes vivieron esta pesadilla durante su viaje de dos semanas en julio.
Plummer relata que pasó una semana con graves síntomas gástricos, que incluyeron vómitos y diarrea. Su situación empeoró tanto que pasó cuatro días sin salir de su habitación, y al regresar a Reino Unido, su médico sugirió que podría estar contagiada de Shigella.
La historia de esta pareja se une a un creciente número de testimonios de otros turistas que buscan asistencia legal tras haber enfermado durante sus vacaciones en Cabo Verde.
Jatinder Paul, abogado especializado en lesiones internacionales de la firma Irwin Mitchell, expresó su preocupación por el elevado número de casos: "El volumen de clientes que continúan presentándose con enfermedades tras sus estancias en Cabo Verde es increíblemente alarmante".
Las estadísticas son preocupantes: en 2022, 806 personas reportaron síntomas gastrointestinales, seguidas de 65 en 2023 y 55 en lo que va de este año. Esto sugiere que no se trata de incidentes aislados, sino de un problema de salud persistente que afecta a turistas de diversas nacionalidades.
Plummer describe su experiencia como un sueño convertido en pesadilla: “Lo que empezó como dolores de cabeza y náuseas se convirtió en la peor enfermedad y diarrea que he conocido”. Aunque muchas personas pueden haber experimentado malestar estomacal en algún momento, ella enfatiza que nunca había estado tan enferma.
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En el marco de la crisis de salud, la comunidad médica ha advertido que enfermedades gástricas pueden acarrear problemas de salud a largo plazo o incluso ser fatales, lo que aumenta la urgencia de abordar las causas subyacentes de estas infecciones.