Ecuador registra un aumento significativo del contrabando de cigarrillos, esta es una de las conclusiones que arrojó una investigación realizada por la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL) y la Corporación Líderes para Gobernar.
El objetivo del estudio fue analizar los sistemas de trazabilidad que tiene el país para el control de la evasión fiscal. Desde el 2015, la Aduana Ecuatoriana cuenta con el Sistema de Gestión y Verificación de Etiquetas Fiscales (SIGVEF) y desde el 2017, el Servicio de Rentas Internas opera con el Sistema de Identificación, Marcación, Autentificación, Rastreo y Trazabilidad (SIMAR).
El SIGVEF permite el control de los licores importados mientras que el SIMAR sirve para el control de los licores, cigarrillos y cervezas de producción nacional. Ambos intentan luchar contra el contrabando y la evasión de impuestos.
El estudio concluye que hay una tendencia decreciente en la recaudación de impuestos a los cigarrillos, causada por una reducción en la producción nacional de tabacos, debido al contrabando.
Según el último estudio de Invamer (Investigación y Asesoría de Mercado), el contrabando de cigarrillos en Ecuador llegó al 79% de participación del mercado hasta diciembre del 2020. Esto quiere decir que ocho de cada 10 cigarrillos que se consumen o se comercializan en el país provienen del contrabando.
“Desde la industria formal vemos con preocupación estas cifras, considerando que representa un crecimiento de más de 70 puntos porcentuales en los últimos seis años”, mencionó Glenda Ruiz, directora de asuntos externos para Itabsa y Proesa, las únicas empresas de la industria tabacalera en Ecuador.
Sin embargo, en el caso de los cigarrillos este crecimiento desmesurado de productos del contrabando coinciden con dos incrementos al Impuesto a los Consumos Especiales (ICE) que se establecieron en las reformas fiscales de los años 2014 y 2016. Lo que significó un alza de un 73%.
Esto provocó que el Ecuador sea tierra fértil para encontrar productos ilegales, debido a la diferencia de precios y a consecuencia de esta carga tributaria que hoy tienen los cigarrillos.
El objetivo de estas medidas tributarias tenían como objetivo recaudar impuestos y disminuir el consumo por parte de la población ecuatoriana por razones de salud pública.
Pero la representante del sector tabacalero explica que si bien hubo una reducción de las ventas legales, esto no se tradujo a la disminución del consumo, hubo un traslado de la demanda legal a la ilegal.
“Según nuestras estimaciones del año 2015 al 2020 son alrededor de mil millones de dólares lo que el Servicio de Rentas Internas o el Estado ecuatoriano ha dejado de recaudar debido al contrabando de cigarrillos”, indicó Ruiz.
Esto quiere decir que el Estado recauda aproximadamente 3,80 dólares de IVA por la venta de cada cajetilla legal de 20 unidades, mismo valor que pierde por la venta de cada cajetilla ilegal.
FRONTERAS PERMEABLES
Un informe de 2020 de la firma Philip Morris Internacional (PMI) indica que Ecuador es el segundo país con mayor incidencia de comercio ilegal de cigarrillos en América Latina, solo por detrás de Panamá. Pero, ¿por qué ocurre este fenómeno?
Hay que entender tres aspectos: las fronteras, comercio informal y falta de educación del consumidor.
Glenda Ruiz explica que el contrabando de cigarrillos prolifera en el país porque las fronteras son permeables. “En la frontera norte, en 586 kilómetros lineales existen 76 pasos informales, pero apenas hay dos puntos de control”.
Por su parte, la directora del Servicio Nacional de Aduana, Carola Ríos, también reconoció que hay un crecimiento del contrabando. “No hay disminución del consumo, ni en licores, ni en cigarrillos, ni en otros productos que son sensibles al contrabando, lo que hay es más comercio ilícito”, dijo en un foro virtual del pasado 13 de julio.
Recalcó que la aplicación del Sigvef y Simar son instrumentos muy válidos para la trazabilidad de los productos, pero admitió que se necesita un control más riguroso dentro del territorio ecuatoriano, cuando el producto está en el mercado.
“Dentro del Estado hay varias instituciones que deben ejercer los controles, entre ellos el mismo SRI, y otros organismos que pueden vigilar el mercado”.
La directora del Servicio Nacional de Aduana añadió que en esta nueva administración trabajará de manera conjunta con otras entidades para controlar el comercio ilícito y se reforzará el trabajo de vigilancia aduanera.
COMERCIO INFORMAL Y EL CONSUMIDOR
La encuesta de la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL) y de la Corporación Líderes para Gobernar, realizada a 384 personas, indica que el 88% de los cigarrillos ilegales se venden a través de comerciantes ambulantes, le siguen las ventas a través de distribuidoras, tiendas, internet y hasta venta a domicilio.
Además, señala que 1 de cada 4 encuestados de 18 a 25 años compran cigarrillos de forma ilegal.
“Los más jóvenes son quienes compran mayormente cigarrillos, bebidas alcohólicas y cervezas de forma ilegal, siendo los cigarrillos sueltos los de mayor adquisición irregular”, reza el informe.
Otro dato importante que arroja esta encuesta es que 1 de cada 4 personas mencionaron que nunca han notado las etiquetas fiscales, mientras que 6 de cada 10 no revisan las etiquetas cuando compran cigarrillos sueltos.
“Todos somos responsables de luchar y acabar contra el comercio ilícito. En el caso de los cigarrillos es muy simple reconocer una cajetilla legal de una ilegal”, dijo Glenda Ruiz, directora de asuntos externos para Itabsa y Proesa.
Desde el 2012, la Ley Orgánica para la Regulación y Control de Tabaco dispone que todas las cajetillas que se comercialicen en el país, sin importar si son de producción nacional o importadas, deben llevar un 60% de advertencias de salud o pictogramas.
Nixon Vergara, presidente de la Asociación de Industriales Licoreros del Ecuador (ADILE), destacó en el foro virtual que es necesario socializar del uso de las aplicaciones SRI-SIMAR y Verifícame para que los consumidores conozcan y se informen para qué sirven, identificando productos de origen legítimo y colaborando en la detección de mercancías de contrabando y así también proteger su salud.
¿CÓMO COMBATIR EL CONTRABANDO?
Enrique Fanta, consultor del Banco Mundial, reconoce que si bien hay avances en la lucha contra el contrabando por parte de las autoridades de Ecuador, aún hay que fortalecer algunos puntos.
Recomienda mayor cooperación entre las aduanas nacionales y con los países vecinos, una opción sería unificar los pasos fronterizos con Colombia y Perú.
“Al estar dos funcionarios de la aduana disminuyen los trámites. El camión para una sola vez y se puede revisar mucho mejor entre dos expertos. En el caso de Chile y Perú funcionan muy bien”.
Más controles, incrementar las sanciones tributarias, pedir facturas a los comerciantes informales que venden cigarrillos ilegales y un sistema de escáneres en las fronteras ; son otras de las alternativas que plantea Fanta para ayudar en el combate contra el contrabando.
Argumenta que detrás del comercio ilícito existen guerrillas o grupos delincuenciales, por ello, cree importante que se trate estos temas como un crimen organizado.
“Entonces, vamos a seguir no solo a la mercancía sino a la plata, porque para hacer contrabando alguien debe estar financiando, alguien debe pagar el transporte , alguien tiene que pagar el almacenamiento”.