Esta mujer de temple dirige el Ministerio de Gobierno y también está encargada del Interior. Su carácter le permitió volver a caminar tras superar una adversidad física, ella agradece por un paso a la vez. Recién se nacionalizó para asumir el cargo público. Aquí revela las razones por las que no pudo hacerlo antes.
Mientras desde la Fiscalía se llevaron las investigaciones de los escándalos de Purga y Metástasis que han demostrado los nexos de la narcopolítica, un tema no menos importante estuvo a cargo de la Policía: la ejecución de los operativos para los allanamientos. Desde el Ministerio del Interior, que está a cargo de la institución policial, Palencia tiene un rol protagónico, aunque el trabajo, dice la ministra, ha supuesto un precio: no tener tiempo para sus hijos y su hogar.
Palencia cuenta que conoció al presidente Daniel Noboa cuando él lo llamó para una asesoría legal hace ya algún tiempo. Ella llegó al país cuando tenía 20 años, tras casarse con un ecuatoriano. Tras su separación, años más tarde, Palencia formó pareja con periodista y político Francisco Huerta a quien recuerda como: “mi profesor, guía, amigo, amor”.
Cuando Daniel Noboa la llamó para el cargo, la impedía no tener la nacionalidad ecuatoriana. Intentó obtenerla durante el gobierno de Rafael Correa, pero había una guerra política declarada con Francisco Huerta. Lo intentó también en el gobierno de Guillermo Lasso, pero no se concretaron las reuniones. Hasta que Noboa firmó el decreto y ella asumió como ministra de Gobierno y del Interior.
¿Cómo ha sido su vida y sus desafíos a cargo de uno de los ministerios más importantes justo en este momento de crisis política y de violencia que atraviesa el país? Esto y más en un perfil completo en la última edición de Revista Vistazo o en nuestra suscripción digital.