El expresidente de la República, Jamil Mahuad, contó importantes revelaciones tras más de dos décadas desde que el Ecuador abandonó el sucre. Lo hace a través del libro “Así dolarizamos el Ecuador: Memorias de un acierto histórico”.
En entrevista con Vistazo, Mahuad aclaró varias ideas que se han quedado en la mente de las personas en torno a la crisis inflacionaria que inició en 1998 y desembocó en el feriado bancario de 1999.
El comentario popular a través de los años es que el expresidente adoptó estas medidas para beneficiar a los banqueros, en especial al Banco del Progreso, dirigido por Fernando Aspiazu, quien había donado dinero para la campaña electoral.
Sin embargo, Mahuad recalca en el libro que Aspiazu si donó dinero a su campaña, como lo hizo con otros candidatos.
“Si fuese cierto, que yo tomé decisiones para ayudarle. ¿Por qué me ataca? Debería agradecerme, hizo todo lo contrario, porque las políticas del Gobierno no lo ayudaron. Las políticas del Gobierno no tuvieron como propósito ni perjudicar ni ayudar a un banco en concreto. Fueron políticas públicas tomadas para todo el sistema en una circunstancia muy difícil”.
Agregó que el Banco del Progreso no recibió nada a cambio de la contribución electoral, “el banco se cerró a los diez días del congelamiento”.
Lea también: ¿Qué revelaciones trae el libro de Jamil Mahuad?
Mahuad también revela que la decisión de dolarizar la economía del país fue analizada seis meses antes con expertos del mundo, incluidos economistas del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
“Después de 21 años, la dolarización sigue ahí con un apoyo que va por más del 90% de los ecuatorianos. Lo mismo ocurre con la firma de la paz con Perú. Tengo esa doble satisfacción, dos políticas públicas de mi Gobierno forman parte ahora del modo de ser ecuatoriano”.
¿Hubo impunidad para los banqueros? ¿Se hicieron auditorías al sistema bancario?, estas y otras preguntas son respondidas por el expresidente en entrevista con Revista Vistazo.