La segunda cita entre la CONAIE y el Gobierno que estaba programada para este martes a las 09h00 de este martes 28 de junio de 2022 tuvo que ser reprogramada, debido al incidente violento ocurrido durante la madrugada en la Amazonía, en el que resultó muerto un militar.
Las delegaciones de la CONAIE, CONFENIAE, ECUARUNARI, FEINE, FENOCIN llegaron a la reunión prevista con los cinco poderes del Estado en la Basílica del Voto Nacional, en Quito, e incluso mientras esperaban la asistencia de los funcionarios del Ejecutivo realizaron una ceremonia ancestral previa.
Pero luego de una larga espera, el presidente de la Asamblea Nacional, Virgilio Saquicela, anunció la reprogramación del diálogo.
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“No está presente el Gobierno Nacional a través de sus delegado. Se han comunicado conmigo y me han indicado que están realizando un análisis en el palacio de Gobierno respecto a la tragedia que se ha suscitado en día de ayer en el oriente ecuatoriano respecto al fallecimiento de un militar”, dijo el titular del Legislativo, al enfatizar que “no se retiran del diálogo, no se rompe el diálogo”.
Sin embargo, pese a la inasistencia de los representantes del poder Ejecutivo, continuó la sesión entre los dirigentes indígenas y las otras funciones del Estado.
Al final, Saquicela informó que a las 14h00 se reinstalará la segunda mesa de diálogos.
Sobre la muerte del uniformado, el presidente de la CONAIE, Leonidas Iza, pidió que se conforme una comisión independiente para que esclarezca los hechos.
También señaló: “somos 7 víctimas de este conflicto” y que "esto parece un pretexto para romper esta mesa de diálogo, nosotros estamos aquí porque estuvimos durante un año con la predisposición al diálogo”.
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La muerte del militar, identificado como José Chicharro, fue durante el ataque de un centenar de manifestar contra un convoy, custodiado por las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, que transportaba combustible en Shushufindi, provincia de Sucumbíos.
Ocurrió en momentos en que Iza, principal convocante a las protestas, y otros líderes de las comunidades pretendían resolver con el Gobierno las demandas de los manifestantes.