Correístas dicen que son víctimas de persecución política por informe de ‘Papeles de Pandora'
La bancada reiteró que las pruebas del informe demuestran conmoción social.
Los asambleístas de la Unión por la Esperanza (UNES) denunciaron este miércoles, 10 de noviembre, que son víctimas de una persecución y judicialización política, luego de que el legislador de CREO, Juan Fernando Flores, asegurara que van a plantear denuncias por un posible golpe de Estado.
La bancada correísta defendió el informe emitido por la Comisión de Garantías Constitucionales que recomienda el inicio de un proceso de destitución contra el presidente Guillermo Lasso sobre los ‘Papeles de Pandora’.
“No es posible que una acción legal y constitucional se intente politizar y lo más grave que una acción constitucional de la Asamblea ahora se quiera judicializar”, dijo Paola Cabezas, coordinadora de UNES.
Los legisladores argumentaron que simplemente han hecho su trabajo de fiscalizar y que le dieron la oportunidad al presidente de acudir a la Asamblea para defenderse, pero no aceptó.
“Esto no es político, es legal, moral y ético”, señaló Cabezas, quien alertó al mundo que “se está orquestando una vez más persecución política y judicialización”.
Además, la bancada reiteró que las pruebas del informe demuestran una conmoción social, por lo que ellos buscarán que la resolución del Pleno incluya este texto, a pesar de que Pachakutik analiza la posibilidad de eliminarlo.
El presidente Guillermo Lasso rechazó el informe presentado el pasado viernes por la comisión parlamentaria que investigaba su aparición en los 'Papeles de Pandora' y tildó sus conclusiones de "patéticamente falsas" a la vez que consideró que la comisión no ha respetado "el debido proceso".
La Comisión hizo ocho recomendaciones, entre las que figura la de que la Asamblea Nacional "verifique la inobservancia por parte del Presidente de la República al Pacto Ético aprobado mediante consulta popular en el año 2017", que prohíbe a funcionarios públicos tener bienes en paraísos fiscales.
En su lugar, el presidente ecuatoriano envió una carta explicando su postura y el origen de sus bienes, e invitaba a sus miembros a interpelarlo en el Palacio de Gobierno por tratarse de un presidente.
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