Después de meses de incertidumbre política y legal, el nuevo alcalde de Quito, Santiago Guarderas, tomó este jueves posesión del cargo tras un dictamen de la Corte Constitucional que dejó en suspenso resoluciones de instancias inferiores a favor del exregidor electo Jorge Yunda, salpicado por irregularidades.
"Estamos reasumiendo la Alcaldía con el único propósito de servir a quiteños y quiteñas", manifestó el flamante alcalde de la capital en una rueda de prensa en el Consistorio, en la que aseguró haber tenido "mucha paciencia".
De 59 años y doctor en Jurisprudencia, Guarderas se desempeñaba como vicealcalde de Quito desde mayo de 2019, llegando incluso a postularse como regidor alegando que Yunda se veía imposibilitado de seguir ejerciendo el cargo por sus frecuentes comparecencias judiciales por un caso de presuntas irregularidades en la adquisición de pruebas anticovid-19 por parte del Ayuntamiento en 2019.
En sus primeras declaraciones como alcalde, Guarderas manifestó: "Vamos a virar esta página dolorosa y triste que vivió Quito", y sostuvo que "la ciudadanía está cansada, fastidiada de luchas y quiere una Administración que resuelva sus problemas y eso es lo que vamos a hacer".
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Avanzó que en la próxima sesión del Consejo Municipal dará a conocer su plan de Gobierno, aunque detalló algunas cuestiones urgentes que requieren de una inmediata solución como la falta de pavimentación e iluminación o la inseguridad.
Mencionó que destinará una partida importante para reforzar la seguridad en la capital al destacar que ha sido testigo en el último tiempo de casos de sicariato, que no se registraban en Quito.
También manifestó su intención de erradicar el comercio ambulante del casco antiguo de Quito y destinar espacios concretos a los vendedores autónomos.
"El centro histórico tiene que estar reactivado económicamente, ser seguro y limpio", aseguró al fijarse como meta para llevar adelante sus planes en el mes de octubre.
La Corte Constitucional aceptó el miércoles una acción extraordinaria de protección presentada por Guarderas, con lo que dio vía libre para la ratificación de la remoción de Yunda.
El pasado 30 de julio, la Corte de Justicia de la provincia de Pichincha había devuelto al cargo a Yunda, quien había sido removido el 3 de junio por un grupo de ediles de oposición que promovían a Guarderas.
El 19 de julio, otro tribunal de Quito había, en cambio, revocado las medidas cautelares solicitadas por Yunda, lo que fue interpretado por el grupo opositor como una victoria, por lo que aceleraron el proceso para que Guarderas asumiera la titularidad en la Alcaldía.
Tras conocer el fallo de la Corte Constitucional, Yunda recordó en su perfil de Twitter que llegó a la alcaldía de Quito por el voto de la ciudadanía en elecciones municipales, justo cuando la ciudad adolecía de una severa crisis.