Rafael Correa arremete contra Estados Unidos y Daniel Noboa tras la prohibición de ingreso: 'se atreven a nombrar a mi familia'
En su reacción, Correa cuestionó la forma en que el Departamento de Estado de EE.UU. comunicó la decisión.
Redacción Vistazo jueves, 10 octubre 2024 - 10:01
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El expresidente Rafael Correa publicó una carta este jueves 10 de octubre, en la que arremetió contra Estados Unidos y el presidente Daniel Noboa, tras el anuncio de su prohibición de ingreso a territorio estadounidense por su implicación en actos de corrupción.
Ayer, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, indicó que Correa y el exvicepresidente Jorge Glas abusaron de sus cargos "al aceptar sobornos a cambio de otorgar contratos gubernamentales favorables".
Correa defiende a su familia
En su reacción, Correa cuestionó la forma en que el Departamento de Estado de EE.UU. comunicó la decisión, señalando que a través de un "escueto comunicado de prensa" se le incluyó a él, a su esposa y a sus tres hijos en la lista de no elegibles para visa estadounidense, acusándolo de ser un funcionario “corrupto”.
Afirmó que, incluso si esta "infamia" fuera cierta, la responsabilidad penal es individual y no por consanguinidad, describiendo esta situación como “una barbarie de la premodernidad mantenida actualmente solo por las mafias”.
"Cuando yo dejé el poder, mi hijo menor tenía apenas 14 años. Incluso se atreven a nombrar a los miembros de mi familia uno por uno, poniendo en riesgo su seguridad", acotó el exmandatario, al asegurar que ni su familia ni él han solicitado visa alguna para Estados Unidos.
"En pocos meses se celebrarán elecciones presidenciales en Ecuador, en las que la Revolución Ciudadana parte como favorita y donde Daniel Noboa, ciudadano norteamericano y su muñeco de cartón, se desploma por ineptitud y corrupción", enfatizó el exmandatario.
En torno a Jorge Glas, quien se encuentra en la cárcel de máxima seguridad La Roca, en Guayaquil, Correa denunció que Glas "se encuentra en condiciones infrahumanas" y que fue “secuestrado” por el Gobierno de Noboa, luego de la invasión de la sede diplomática mexicana el 5 de abril de 2024 y pese a su condición de asilado político mexicano.
Asimismo, Correa rechazó que la publicación del Departamento de Estado "involucra hasta a su exesposa (de Glas), de la cual está divorciado hace ya varios años".
Decisión de Estados Unidos
El Secretario de Estado de los Estados Unidos anunció que el expresidente Rafael Vicente Correa Delgado y el exvicepresidente Jorge David Glas Espinel no son elegibles para ingresar a los Estados Unidos debido a su implicación con actos significativos de corrupción durante su ejercicio como funcionarios públicos.
Según la ley de los Estados Unidos, una designación se realiza contra personas con participación directa o indirecta en corrupción significativa o una violación grave de los derechos humanos.
De igual manera permite el anuncio público de tal designación, y no hay límite de tiempo para la medida.
El Departamento también designó a la esposa de Correa, Anne Malherbe Gosselin, y a sus hijos mayores de edad, Sofia Correa, Anne Dominique Correa, y Rafael Miguel Correa, como inelegibles para entrar a los Estados Unidos. Asimismo, la ex esposa de Glas, Cinthia Diaz Aveiga y su hijo mayor de edad Jorge Glas Diaz.
"Correa y Glas abusaron de sus posiciones como presidente y vicepresidente del Ecuador aceptando coimas, incluidas contribuciones políticas, a cargo de conceder contratos del Estado", ha argumentado el gobierno norteamericano.
El embajador estadounidense en Quito, Art Brown, resaltó que Estados Unidos continúa apoyando al Ecuador en su lucha contra la corrupción y el fortalecimiento de la transparencia en todos los niveles de la sociedad. "Esta medida tomada por el Gobierno de los Estados Unidos deja claro que nadie, sin importar su rango o cargo, está exento del cumplimiento de la ley", resalta el comunicado.
Correa y Glas están condenados a ocho años de cárcel por cohecho en el Caso Sobornos. Además, Glas enfrenta una segunda acusación por peculado y una condena adicional de seis años de cárcel por asociación ilícita en el Caso Odebrecht.
