Alejandra Jaramillo, en paz y agradecida
Sorprendió a todos al dejar Ecuavisa sin previo aviso. Con tan solo 28 años la querida “Ale” sigue demostrando tener los pies sobre la tierra y la cabeza llena de estrellas por conquistar.
Hace mucho tiempo que quería entrevistar a Alejandra y por obvias razones tuvimos que esperar que las aguas se calmen después de la tragedia que se llevó el amor de su vida. Conocí a una mujer que me sorprendió por la paz que transmite al momento de conversar. Es atenta y generosa, habla despacio y siempre concluye sus frases con una sonrisa. Su cabellera enmarca un rostro que todavía no revela el paso del tiempo. Al verla comprendí porqué es tan querida por los niños y el público en general. Vive agradecida con sus padres, su Esmeraldas natal y las oportunidades que supo aprovechar, da lo mejor de ella, aprende, avanza... una niña alegre en el cuerpo de una mujer trabajadora y soñadora.
Tu salida de Ecuavisa sorprendió a todos. ¿Lo venías pensando hace mucho tiempo?
Hace varios meses. Este año todo cambió para mí, y creo que esta pausa televisiva era necesaria. Tenía varias dudas pero al final del camino siempre hay respuestas y señales. Esas me llevaron a tomar la decisión de alejarme de la TV por un tiempo, fue una decisión meditada y tomada con tranquilidad. Me fui en paz y agradecida.
Se vienen cambios en tu vida...
Este año cambiaron muchas cosas y esta decisión es parte de aquello. Los cambios no son malos, están repletos de aprendizajes y nuevos comienzos. Soy una eterna soñadora y no quiero dejar de soñar nunca. Quiero seguirme ilusionando con metas nuevas. No quiero perder la oportunidad de crear, crear mis emociones, crear mis oportunidades, y todo el infinito mundo que hay dentro de lo que podemos crear.
¿A qué te vas a dedicar ahora?
A meterle mucha cabeza, tiempo, atención y amor a mis proyectos con mi empresa Mundo Keto. Además estaré atenta a que otras puertas se abran para mí en este reinventar. Ese tiempo para reflexionar siempre viene bien. Lo que sí tengo claro es que en la ausencia se agudiza el ingenio. Y mi alejamiento de la TV seguramente traerá otras ideas renovadas y formas de seguir adelante.
De todas las reacciones después de tu despedida, ¿cuáles fueron las más sorprendentes?
Todas las reacciones me conmovieron y emocionaron. Pero debo confesar que se me hizo chiquito el corazón cuando vi a Henry Bustamante llorando como un niño cuando se enteró de la noticia, en vivo en el programa. Lo abracé mucho y le pedí disculpas por no haberle contado antes. Quería manejar todo lo más bajo perfil posible.
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