Cimarrona: Soy negra porque el sol me miró
“En Ecuador las hijas, nietas y bisnietas de las mujeres negras que sobrevivieron a la esclavitud guardan el legado de África en su espiritualidad. Las prácticas ancestrales de la diáspora y su reconfiguración cultural migratoria se adaptaron a sus nuevos territorios y se han convertido en un instrumento para la reafirmación de la identidad negra y afrodescendiente en las nuevas generaciones”, así es como la fotografa Johanna Alarcón nos presenta su último libro “Cimarrona: Soy Negra porque el sol me miró”, un proyecto fotodocumental que pretende preservar y exponer la identidad afrodescendiente que vive en las mujeres “cimarronas”.
Las “Cimarronas” son mujeres rebeldes y estrategas que lideran la liberación de la diaspórica afro desde su llegada en el siglo XVI. Estas mujeres fueron quienes idearon estrategias de escape que se transmitieron en sus expresiones culturales y prácticas espirituales. Y aunque hoy se han combinado con el sincretismo religioso, permanecen como piezas claves para revertir su obligada desterritorialización. Este grupo se transformó culturalmente en un símbolo contra la esclavitud y el racismo. Incluso, su historia es también el legado de la nueva feminidad para el mundo.
Este libro es el resultado de cinco años retratando historias de mujeres cimarronas y afrodescendientes. Varias feminas de diferentes generaciones narran sus vivencias personales y comunitarias en reflexión sobre el racismo y la fuerza del cimarronaje. Su autora espera remarcar el empoderamiento de las mujeres afros y su resiliencia cultural con este proyecto.
A continuación, su creadora nos comparte varios pensamientos sobre su trabajo:
"Yo nunca he creído en una sola historia que por años nos han contado repetitivamente, por eso creo en las historias con un poder transformador, creo que las historias que nacen de los cantos, de los arrullos, de la marimba, de la bomba, de los ríos, de los esteros, del atardecer, de los valles, de las noches... creo que esas historias, esas vidas, esas mujeres abrieron y abren caminos de libertad para toda la humanidad".
"Como muchas ancestras dicen ‘llegaron a un camino de piedra y sembraron rosas’, con este proyecto quiero que nos podamos encontrar a través de la mirada, compartir más allá de los estigmas, pero también abrir reflexiones sobre el racismo invisibilizado, la hipersexualización, la injusticia, la violencia porque esa ha sido la mirada que hemos tenido sobre la diáspora, sobre el pueblo afrodescendiente".
"Mi principal reto ha sido crear una obra que haga justicia a estas historias, a estas mujeres. No ha sido un reto solitario, ha sido un reto compartido de una representación consentida, de una vivencia compartida, de un amor compartido y en ese amor y ese respeto se enmarca este proyecto".
Hecha un vistazo al libro aquí:
Este proyecto tiene el apoyo de National Geographic Society, Cumandá Parque Urbano, Addis Abeba, Movimiento Sarta, AECID, IFCI, Secretaría de Cultura y Organización de Estados Iberoamericanos.
Créditos de las imágenes:
Fotografías del libro Cimarrona: Alejo Reinoso y Soledad Rosales Fotografías documentales y de comunidad: Johis Alarcón