El multimillonario sudafricano Elon Musk, jefe de la compañía de automóviles eléctricos Tesla y la red social Twitter, ordenó a todos los empleados de la marca a volver a las oficinas, declarando que el trabajo remoto ya no sería aceptable, según revelaron correos de su empresa que se filtraron en redes sociales.
Los correos decían que los trabajadores debían hacerse presente en una de las oficinas principales de la compañía, "no en una sucursal remota que no tiene relación con las labores del trabajo". Sin embargo, dijo que está dispuesto a analizar cualquier solicitud de excepciones ante este giro en su política laboral.
Musk, mencionó en Twitter que todos los que no estén dispuestos a seguir las nuevas reglas pueden "pretender que están trabajando en otro lugar".
Su decisión de llevar a cabo la presencialidad es sustentada en que otras industrias están definiendo si mantienen o no la práctica del trabajo remoto que se impuso durante la pandemia de Covid, pero es porque estas compañías no requieren de dicha presencialidad.
Manteniendo la colaboración personalizada, porque para él esto es un punto clave y fundamental para garantizar el éxito de la compañía.