A sus 9 años, Didier, un niño apasionado por el fútbol, se enfrenta a un diagnóstico devastador. El padece de Sarcoma de Ewing, un tipo de cáncer de hueso que lo ha privado de caminar durante 7 meses. Su única esperanza es una cirugía de salvataje de miembro, alternativa a la amputación.
Para que el caso de Didier llegue a más personas, la Fundación Metrofraternidad lanzó una campaña para recaudar fondos y hacer posible la operación que podría devolverle la movilidad en su pierna.
La madre de Didier, Gabriela, relata cómo dejó de trabajar para cuidar a su hijo desde el diagnóstico. "Es un niño muy inteligente, y sé que con la ayuda de todos, vamos a salvar su piernita", comenta con esperanza.
Según cuenta la fundación, la familia no sospechaba del cáncer hasta que un golpe durante un partido de fútbol reveló la presencia del sarcoma.
El tratamiento que requiere Didier es un proceso nada convencional: una cirugía de salvataje de miembro. Este procedimiento utiliza tecnología virtual y computarizada, una opción poco común en Ecuador que puede llegar a costar hasta 50 mil dolares.
La fundación, en colaboración con el Hospital Metropolitano y su Cuerpo Médico, ya ha cubierto el 60% del costo de la cirugía. Ahora, están buscando donaciones para cubrir el 40% restante y hacer realidad la operación que permitirá a Didier volver a caminar.
Las donaciones pueden realizarse a través de los siguientes canales:
Sitio Web: Fundación Metrofraternidad
Transferencias directas a la cuenta de Fundación Metrofraternidad (RUC. 1790850234001):
- Banco del Pacífico, Cta. Cte. 5175957
- Banco de Pichincha, Cta. Cte. 3063270104
El Sarcoma de Ewing es un tipo de cáncer común en niños y adolescentes que afecta los huesos o el tejido blando, lo que impide la movilidad.
Los síntomas de esta enfermedad incluyen dolor, hinchazón, sensibilidad cerca del área afectada, fiebre y cansancio inexplicado. La causa de este padecimiento aún es imprecisa. Los tratamientos llegan a ser dolorosos y la amputación suele ser una alternativa.
Didier vive en Guayaquil con su madre, hermano y abuelos. Su familia lo describe como un niño feliz que le encanta la pintura, los juegos y es amante del fútbol.
La fundación invita a la ciudadanía a hacer posible la cirugía de Didier y devolverle la oportunidad de caminar y jugar fútbol.