El 17 de noviembre se conmemora el día internacional de La Lucha Contra el Cáncer de Pulmón, por lo que es el momento ideal para tratar su importancia y prevención.
Al hablar de cáncer de pulmón inmediatamente pensamos en fumar, un hábito que constituye uno de los mayores factores de riesgo de contraer esta enfermedad, sin embargo, no es la única práctica a la que debemos prestar atención para la prevención del cáncer.
De acuerdo con estudios recientes, enfermedades previas que hayan afectado al pulmón de manera directa pueden generar cicatrices en el tejido rígido generando fibrosis pulmonar y un mayor riesgo de que células cancerosas puedan aparecer.
Por otro lado, el 5% de casos de cáncer del pulmón se atribuyen a la exposición a la polución y mala calidad del aire en zonas urbanas.
Frente a esta realidad, el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón se convierte en un factor latente en regiones vulnerables a mayor contaminación ambiental.
A esta enfermedad se le atribuyen el 25% de muertes de todos los tipos de cáncer. Al ser una patología “frecuente” también su forma de detección y evaluación es más eficiente, permitiendo avanzar con múltiples opciones de tratamiento y oportunidades de recuperación.
Si bien, en la mayoría de los pacientes con cáncer de pulmón, la sintomatología no suele aparecer de forma rápida, es importante estar atentos a signos recurrentes como:
- Tos con sangre en el esputo.
- Dificultad para respirar.
- Dolor que afecta a estructuras óseas.
- Cansancio.
- Pérdida de apetito.
- Pérdida de peso.
En algunos casos, el cáncer de pulmón puede originar un dolor localizado en la espalda y en fases más avanzadas, debilidad, dolor de huesos y articulaciones, mareos y cansancio generalizado.
¿CÓMO PREVENIRLO?
Cero tabaco: Fumar está relacionado con varios tipos de cáncer, incluyendo el cáncer de pulmón. Evitar el tabaco o decidir dejar de usarlo, es una parte importante de la prevención del cáncer.
Limita el consumo de alcohol: Las cantidades de alcohol ilimitadas pueden aportar en el desarrollo de diversos tipos de cáncer entre ellos el de pulmón.
Equilibrio y bienestar: Mantener una dieta equilibrada y una vida activa, permite que la salud en general se mantenga en buen estado, pero sobre todo en el caso de los pulmones es muy importante el ejercicio aeróbico ya que los estimula y fortalece.
El desafío de luchar contra esta enfermedad ha permitido un espacio para la innovación, pues en la actualidad su tratamiento ha evolucionado en alternativas como: la cirugía, quimioterapia, radiación y la inmunoterapia.
La oncóloga Tania Soria, habla sobre la inmunoterapia, un tratamiento que ha avanzado mucho gracias a la innovación y la medicina de precisión “este tipo de tratamiento logra, a partir de la inmunidad propia del paciente, destruir las células cancerosas y avanzar en el proceso de recuperación. Frente al cáncer de pulmón solo nos queda prevenir y evitar los hábitos poco saludables como fumar, es muy importante que cuidemos nuestra salud pulmonar con una vida activa”.