<img src="https://certify.alexametrics.com/atrk.gif?account=fxUuj1aEsk00aa" style="display:none" height="1" width="1" alt="">
Enfoque

Exportadoras y empresas logísticas continúan en la lucha contra la contaminación de carga

A través de la prevención, varias empresas unen esfuerzos para evitar que en cualquiera de las etapas logísticas la carga sea contaminada.

viernes, 6 mayo 2022 - 09:00
Facebook
Twitter
Whatsapp
Email
A través de la prevención, varias empresas unen esfuerzos para evitar que en cualquiera de las etapas logísticas la carga sea contaminada.

Según datos de la Dirección Nacional de Investigación Antidrogas de la Policía Nacional, en 2021 se decomisaron 210.181 kilogramos de droga en Ecuador, teniendo un incremento del 39 por ciento en comparación con el 2020.

De esta incautación, 192.239 kilogramos estaban destinados al tráfico internacional. Las consecuencias son muchas y una de ellas recae sobre el sector exportador, el cual ha sido afectado y cuya reputación empieza a deteriorarse implicando pérdidas de potenciales contratos.

Lea también: Contecon incrementa inversión en el Puerto de Guayaquil

Sin embargo, este problema no es reciente, y es que las exportaciones por muchos años han estado constantemente en riesgo a causa de la contaminación de la carga, así lo explica Fabricio Muñoz, director ejecutivo de BASC Capítulo Guayaquil, tras afirmar que en múltiples ocasiones las empresas no previenen el riesgo de ser utilizadas para este tipo de ilícito.

Muñoz manifiesta que usualmente los implicados en este delito buscan dónde está el eslabón más débil de la cadena del comercio exterior para introducirse y enviar su mercancía ilícita hacia los destinos finales. Esto ha obligado a que se creen nuevas alianzas para mantener un comercio seguro, este es el caso de BASC, la cual ha decidido trabajar en la prevención de este riesgo.

Lea también: Gran crecimiento del comercio exterior ecuatoriano en los primeros meses

A través de esta norma, existen diversos requisitos de seguridad que las empresas certificadas deben implementar para prevenir este y otro tipo de delitos. En este caso, las empresas son auditadas constantemente para comprobar que sus procedimientos van acorde a los requisitos de la norma, la cual tiene requisitos para la contratación de asociados, ya sean clientes o proveedores de servicios, así como en la contratación del personal.

“Cada cadena de suministro debe ejercer sus controles y si hay un eslabón de esta cadena que no los ejerce, ese será el eslabón más débil que permite toda la carga sea contaminada”, indica Muñoz. La principal herramienta de la norma es que mediante una estructura de procedimientos de cada una de las partes del proceso operativo (exportadora, transporte, empresa de seguridad, terminal, buque, puerto) se pueda mantener y demostrar la trazabilidad documental de su operación.

$!Para evitar la clonación del sello de seguridad, Fach cuenta con un diseño único, que tiene una numeración y código de barra, cuya lectura es diferente al visible con colores fosforescentes

Por otro lado, el aumento de estrategias de contaminación de carga ha llevado a la creación de nuevas empresas que prestan sus servicios para tratar de minimizar este riesgo, complementario al de inspección de contenedores. Fernando Farah, gerente general de Fach, menciona que además de tener la certificación BASC, los principales procesos que la empresa realiza para evitar o prevenir que la carga de sus clientes sea contaminada son creados en bloques de seguridad, tratando de que todas las compañías que intervienen en el proceso de exportación puedan hacer un cruce de información.

En el caso de las empresas de inspección su proceso se basa en la revisión física de las unidades cuando salen de los patios, con un intercambio de información declarada en el intercheck versus la revisión del contenedor, fotos o videos de evidencia del contenedor antes y después de revisar, más la información compartida con la hoja de inspección y la información física recibida antes de cargar el producto.

“A estos procesos se incluye un monitoreo satelital con reportes de paradas o aperturas no autorizadas, colocación de sellos de seguridad por parte del exportador y naviera, intercambio de información antes de ingresar al puerto y en el caso de implementar revisión canina, ésta se la realiza en el punto de inspección antes del embarque, teniendo anteriormente una revisión de la carga en la planta”, explica Farah.

Selección exclusiva

Daniella Maridueña, gerente general de Logiserline, ratifica que a pesar de todas las adversidades por las que ha atravesado el sector con la pandemia, la empresa prefiere escoger al cliente exportador.

Diariamente la empresa recibe alrededor de tres solicitudes de compañías que desean contar con sus servicios, sin embargo, por el incremento de la contaminación de carga, son ellos quienes deciden aceptar a su cliente basados en diversos parámetros de la certificación BASC que poseen.

Otra condición es que toda la cadena logística debe estar a su cargo, por lo que posee proveedores que mantienen la misma certificación, y sus delegados verifican personalmente el cumplimiento de dichos procesos, incluso al momento que la carga llega a otros países.

Más leídas
 
Lo más reciente