Una amenaza de muerte recibió el arbitro ecuatoriano Diego Lara en su domicilio en Quito, donde dejaron un paquete que contenía una carta y dos proyectiles calibre 45.
El incidente se produjo luego de conocerse que él será el juez central del partido entre 9 de Octubre y Orense. La dirigencia del cuadro guayaquileño había pedido su cambio.
"Rechazamos enérgicamente este lamentable hecho, el mismo que ha sido denunciado a las autoridades competentes, quienes ya se encuentran realizando investigaciones para esclarecer este bochornoso incidente", dice un comunicado de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) y la Liga Pro.
Además, pidieron unir esfuerzos para que el fútbol ecuatoriano "no se empañe con amedrentamientos -de ninguna índole- que atenten contra la seguridad de todos sus componentes, así como del normal desempeño de nuestras competiciones y de los valores que promueve nuestro deporte".
Previo al incidente, el club de fútbol 9 de Octubre había solicitado a la Comisión Nacional de Árbitros el cambio del juez Diego Jefferson Lara León, que fue asignado para su partido contra Orense, "debido a los constantes errores arbitrales en varias fechas".
"Como antecedentes el Sr. Lara expulsó, injustamente, a nuestro jugador Orlin Quiñonez en la fecha 9, fase 1 de la presente temporada. En base a lo expuesto y con el afán de que no se vea perjudicado el deporte, solicitamos se revoque la designación del Sr. árbitro Diego Lara para el partido 9 de Octubre vs Orense, que se disputará este fin de semana, en caso de no modificar la designación, jugaremos bajo protesta", argumentó el club mediante un comunicado.