Sector camaronero evalúa las pérdidas económicas ocasionadas por las lluvias, provincia de El Oro sufre mayores afectaciones
El desbordamiento del río La Camarona es uno de los tantos problemas que arrastra el sector camaronero debido al temporal invernal. La Cámara Nacional de Acuacultura (CNA) informó que ese desbordamiento afectó a las piscinas en El Morro y Safando, pertenecientes a la provincia del Guayas.
Todavía continúa en evaluación los daños, pero la CNA aseguró que la producción camaronera sufre de un duro impacto. En total, la cámara ha contabilizado más de 100 familias vinculadas a la actividad camaronera que han sido perjudicadas por fenómenos naturales en las recientes semanas.
En la provincia de El Oro, el panorama es más complejo. Por ejemplo, 3.516 hectáreas fueron afectadas por el terremoto y el desbordamiento del río Santa Rosa. Económicamente, las pérdidas bordean los tres millones de dólares de acuerdo con el viceministerio de Acuacultura. Adicionalmente, la CNA explicó que las pérdidas principalmente se debían a la dificultad de movilizar el producto y el retraso en la provisión de insumos.
“En el terremoto hubo destrucción de muros, infraestructura de campamentos, estaciones de bombeo, generadores de energía y sistemas de conducción, vías internas, pozos sépticos, área de almacenamiento de insumos, casas, bodegas, canales, compuertas, equipos de aireación, garitas y postes. Como impacto social se registró una rotación inusual de turnos hasta que se realicen las reparaciones de riesgo”, manifestó la Cámara.
El Guabo, Arenillas, Machala, Santa Rosa y Huaquillas acumulan 2,2 millones de hectáreas afectadas por el invierno. Adicionalmente, esto conlleva a la alteración de parámetros físicos-químicos y el desequilibrio del ambiente. Las consecuencias son enfermedades virales y bacterianas en el camarón, así como la afectación a la calidad del agua y del suelo.
“Cuando sube la marea, existe el riesgo de escape de animales en piscinas lo que puede desencadenar futuras alteraciones genéticas. A esto se suma que durante la temporada invernal se registra la presencia de dinoflagelados en la denominada marea roja. Esto afecta la calidad del camarón y requiere un manejo especial en las piscinas”, agregaron los voceros de la CNE mediante un comunicado.