de los últimos 13 años
El mercado de motocicletas sigue creciendo en el país; el impulso proviene del desarrollo del ‘delivery’ y otros servicios de mensajería, además de un consumidor cuya capacidad adquisitiva es limitada dentro de un país en crisis
Más de 198 mil motos se vendieron a nivel nacional en el 2023. La cifra más alta desde el año 2011, según los reportes de la Asociación de Empresas Automotrices del Ecuador (Aeade).
La cantidad de unidades vendidas de enero a diciembre pasados supera en 7,4% la alcanzada en el 2022 y en 133% la que se obtuvo diez años antes, en el 2013.
Las cifras confirman el saludable ritmo de crecimiento del mercado, que supera al de los vehículos si se mide en unidades colocadas por año. Unos 15 competidores se disputan, en dólares, un sector que mueve más de 200 millones de dólares al año.
“El mercado se ha venido desarrollando de manera estable desde el 2010 y únicamente ha sido afectado por eventos mundiales, como la pandemia, y el comportamiento de la economía del país”, sostiene Juan Malo, gerente general de Indian Motos, uno de los jugadores dentro del negocio.
Hay cuatro factores que explican el incremento del mercado de las motos en el país y, de manera general, en América Latina: el desarrollo de las plataformas de pedidos a domicilio o ‘delivery’, que ha abierto una posibilidad laboral para miles de personas; su moderado costo como herramienta de trabajo versus la adquisición de un vehículo; menores gastos en mantenimiento y en combustible.
En el recambio, hay también oportunidades
Alrededor del 53% de las motos que se venden anualmente en el país tiene un fin utilitario, según las cifras de la Aeade. Un 28% tiene doble propósito: trabajo y movilidad personal o familiar. Y el porcentaje restante son motos de gama deportiva.
El mercado local, comenta Malo, tiene todavía potencial y se prevé que este año su crecimiento mantenga el ritmo del 2023. “Todavía la cantidad de motocicletas por número de habitantes es menor que en Colombia, México o Perú”.
Las marcas Shineray, Daytona, IGM, Bajaj y Ranger, en ese orden de participación, colocan el 46% de las motos vendidas al año en el país, de acuerdo con cifras que comparte el empresario. Coinciden con la información del gremio automotriz para el 2022.
En un mercado que ha madurado ya por más de diez años, el consumidor también se ha ido modificando. Quienes en un inicio buscaron un producto básico, y están ya cambiando su moto, optan -según Malo- por una de mejores características y rendimiento. Ahí, las oportunidades de negocio también se amplían y garantizan la proyección del sector.