Embajador de la Unión Europea se marcha de Ecuador: esto dijo sobre las crisis en el país y el visado Schengen
El embajador de la Unión Europea (UE) en Ecuador, el belga Charles-Michel Geurts, se marcha tras concluir una misión de cuatro años con la confianza de que el país podrá superar todas sus crisis en materia de seguridad, gobernabilidad y economía, y con una admiración por la resiliencia que ha demostrado la sociedad ecuatoriana.
Durante su estancia en Ecuador fue testigo del impacto de la pandemia de la covid-19, una ola de protestas en 2022 liderada por el movimiento indígena, la crisis política de 2023 que derivó en elecciones generales extraordinarias, las consecuencias para el sector exportador de la invasión de Rusia a Ucrania, una crisis energética con periodos de apagones y, sobre todo, el auge de la violencia criminal, que ha hecho de Ecuador el país con más homicidios per cápita de Latinoamérica.
"Me voy con una admiración y con una gran confianza (en Ecuador)", manifestó Geurts en una entrevista con EFE, donde consideró que "el país tiene los recursos internos para salir de las varias crisis", a las que ha ido entrando una tras otra, sin tiempo para solucionar ninguna.
El jefe de la Delegación de la UE en Ecuador recordó que el país "es un socio estratégico para la UE", porque comparte "los mismos valores de democracia, derechos humanos y Estado de Derecho". "Creemos en Ecuador. Ecuador merece creer lo mismo y quizás creer un poquito más (en sí mismo), tiene una modestia demasiado grande", afirmó Geurts.
En ese sentido, apuntó que las elecciones generales de 2025 serán "un punto de inflexión" para tener un Gobierno de cuatro años, con tiempo para hacer reformas y atacar las múltiples crisis.
Asimismo, el embajador reconoció que termina su misión sin haber podido lograr el objetivo de la exoneración de visados para viajes de corta duración al espacio Schengen, una posibilidad que de momento, según admitió, es complicada por la presión migratoria y de refugiados ucranianos que afronta la UE actualmente y el elevado porcentaje de visados rechazados por las embajadas europeas en Ecuador.
La cooperación internacional "es clave"
"En temas de seguridad, la cooperación internacional es clave", comentó Geurts al señalar que la canciller Gabriela Sommerfeld les trasladó que "el 75 % de la cocaína del mundo transita por Ecuador, y la mayoría va a Europa".
Desde la UE, la cooperación en materia de seguridad se ha concentrado especialmente en fomentar el intercambio de información entre la Policía de Ecuador y la Europol y en aplacar la crisis de las cárceles ecuatorianas, donde entre 2021 y 2023 han sido asesinados más de 500 presos, la mayoría en una serie de masacres por enfrentamientos entre bandas criminales rivales.
Geurts destacó la llegada de oficiales europeos a Guayaquil, cuyo puerto se ha convertido en una de las mayores lanzaderas de cocaína hacia la UE, a lo que se sumará el apoyo al sector privado para un sistema de trazabilidad de los contenedores.
"Estamos a punto de dedicar otros 10 millones de euros. Vamos a alcanzar 20 millones de euros en materia de cooperación de seguridad bilateral", destacó el diplomático europeo, que anticipó un préstamo importante del Banco Europeo de Inversiones (BEI) para la digitalización de la Justicia.
En las cárceles, la UE ha apoyado el desarrollo de un censo penitenciario, así como la formación de nuevos guardias carcelarios con un enfoque en derechos humanos y la separación de presos según su nivel de peligrosidad y no de acuerdo a la banda criminal a la que pertenecían.
Inversiones, "un acto de fe"
El embajador incidió en el despliegue de Global Gateway, la iniciativa de la UE para impulsar inversiones que aceleren la transición energética y la economía verde en el mundo, lo que en Ecuador se ha traducido en fondos para infraestructura, obras de agua y saneamiento, energía renovable, medio ambiente y lucha contra la desnutrición crónica infantil.
Los fondos se han destinado a los gobiernos locales a través de créditos entregado por el banco estatal BanEcuador, que ha recibido más de 300 millones de euros, según señaló Geurts. "Toda esta estrategia de inversiones es un acto de fe en el Ecuador. Es una prueba de confianza. Nadie va a invertir en un país en lo cual no tiene confianza", sostuvo.
Geurts también destacó el progreso del comercio bilateral con la UE, que no ha dejado de crecer tras la entrada en vigor del tratado de libre comercio, pese a la pandemia y las distintas crisis.
"Mientras el PIB de Ecuador ha crecido de manera marginal en los últimos años, las exportaciones a la UE han crecido en 51 % (en siete años) y en productos de gran calidad, cantidad y sostenibilidad", destacó.