Asambleísta Bella Jiménez, responde a las acusaciones de cobrar coimas por cargos públicos: dice que todo está “perfectamente orquestado” en su contra

Bella Jiménez respondió a las acusaciones mediante su cuenta de Twitter. La segunda vicepresidenta de la Asamblea Nacional señaló a sus asesores de aprovecharse de sus cargos para beneficios personales. Además, dijo ser perseguida porque está próxima a presentar un exhorto al presidente de la República para detener el alza de los combustibles.

Según la investigación realizada por los portales Periodismo de Investigación y La Historia, Jiménez estaría involucrada en supuestos cobros de coimas a cambio de la gestión para cargos públicos en la Asamblea Nacional y otras entidades del Estado, lo cual por ley es prohibido.

El jefe del bloque de la Izquierda Democrática, Alejandro Jaramillo, ingresó el sábado una denuncia en la que señala que las acusaciones deben ser comprobadas y sancionadas, porque además de atentar los deberes y responsabilidad de los legisladores, también atentan contra la imagen del cuerpo legislativo.

La agrupación política se reunirá en su Comité Nacional de Ética y Disciplina de forma urgente para tratar la expulsión de Jiménez del partido. Por su parte, el presidente de la Comisión de Fiscalización de la Asamblea, Fernando Villavicencio, extendió la denuncia a la presidenta del legislativo, Guadalupe Llori, y a la fiscal general del Estado, Diana Salazar, para los fines pertinentes.

En dicho documento, Villavicencio adjuntó audios y otros papeles donde supuestamente interviene Jiménez, conversaciones vía WhatsApp entre el 9 y 10 de junio, que revelarían la gestión de los cargos públicos. Sin embargo, la asambleísta Jiménez asegura que existe una campaña de desprestigio “oscura e incesante en contra de la Asamblea Nacional”. Expresó que pronto esa cadena se extendería con la presidente de la Asamblea para destituirla.

Jiménez dijo que ya no pertenece a la Izquierda Democrática porque no respetaron su derecho a la defensa. Comentó que demoró en pronunciarse públicamente por una emergencia de salud de una de sus hijas, pero que “la Izquierda Democrática y otros asambleístas empeñados en ocultar sus errores, me han acusado y juzgado sin haberme escuchado siquiera”.