Cristina de Álvarez: "En una relación es tan importante lo que estoy diciendo como la manera en que lo digo"
Muchos encuentran su vocación en medio de experiencias difíciles, algo que también le ocurrió a la psicóloga de parejas Cristina Guerra de Álvarez. Tras pasar por un divorcio, descubrió que su meta era guiar a los matrimonios que se encuentran en crisis, hacia un trabajo constante para mejorar su relación.
Lleva más de 15 años en su práctica profesional y a través de su cuenta de Instagram brinda consejos prácticos que ayudan a las parejas a reconectar. “Todos somos personas imperfectas, estamos plagados de cosas que tenemos que cambiar, que tenemos que refinar a través del tiempo”, dijo para el segmento ‘Chicas Reales’ de Revista Hogar.
Junto a su esposo, Jhon Álvarez, ofrece terapias matrimoniales basadas en un estudios científicos con más de 40 años de investigaciones, se trata del Método Gottman, en el cual a través de los 7 principios para que un matrimonio funcione, se busca dar herramientas a las parejas para resolver y mediar sus conflictos.
Tanto ella como él, decidieron especializarse en esta rama luego de tener experiencias negativas en sus relaciones anteriores.
“Habiendo pasado por un matrimonio que no funcionó, yo tenía ese objetivo en mente, de que a nadie le enseñan cómo tener una relación (...) Yo entendí que una de las cosas que más valoraba es la lealtad”, dijo, y explicó que partió desde allí para escoger un compañero de vida. “Tenía que ser alguien cuyos valores fueran como los míos”.
Para Guerra, el centro de los conflictos en una pareja no es el tema por el que se discute, sino la manera en la que se habla sobre ello. Al minimizar la comunicación o deteriorarla, una situación pequeña podría tener la capacidad de volverse un problema serio y estallar como si de un volcán se tratara, afirma.
“Las parejas que nos llegan a consulta generalmente es porque ya están al borde y es una pena, porque llegan y ya están cansados, no saben qué hacer. Eso nos da una desventaja en el sentido de que, cuando les decimos que esto requiere esfuerzo, es difícil ver a las caritas que dicen: ‘hemos sufrido tanto y para colmo tenemos que trabajar más’”, menciona esta experta.
Según Cristina, la correcta comunicación es la mejor forma de resolver un conflicto matrimonial, por lo menos para aquellos que son “solucionables” más rápidamente, puesto que hay otros que corresponden a diferencias de temperamento, de personalidad, de carácter, de gustos y de historia familiar.
Que tomar en cuenta a la hora de rescatar una relación
1. No tomar por sentada la amistad en una pareja. Tendemos a olvidarnos de que al principio fuimos muy buenos amigos, de que disfrutamos estar el uno con el otro, de que nos contábamos que es lo que sucedía en nuestra cabeza y en nuestro corazón, compartíamos las cosas, planificábamos juntos, soñábamos juntos, ese tipo de cosas en la logística del día a día, tendemos a dejarla en el puesto número 18 de una lista de tantas cosas que hacer. Hay que estar en constante actualización y mantener la amistad viva.
2. No tomar por sentado el contacto físico no sexual. Los abrazos, el beso de despedida en la mañana, el sentarse juntos y tomarse de la mano, el caminar juntos tomados de la mano, ese tipo de expresiones de cariño físico diario, tendemos a dejarlo a un lado y dejamos el contacto físico solamente para los momentos íntimos de pareja.
3. Dar el beneficio de la duda siempre. No saltar a conclusiones negativas inmediatamente, dar el beneficio de la duda. Cuando el esposo no contesta el teléfono, tendemos a pensar ‘a propósito lo apago’, ‘no me quiere hablar’ o ‘que andará haciendo’; en lugar de eso piensa en que puede haber una razón razonable. No creas ciegamente en la popular frase "Piensa mal y acertarás".
Conoce más en el segmento ‘Chicas Reales’ de Revista Hogar.