¿Por qué Betty y Hugo Lombardi, esposos en la vida real, se divorciaron a los 10 meses?
La respuesta es sí. Aunque muchos desconocen sobre la corta historia de amor de Ana María Orozco y Julián Arango, fue real, e incluso fuentes cercanas a la producción afirman que el proceso de separación marcó las grabaciones de una de las telenovelas más queridas de la televisión colombiana.
Los protagonistas de este efímero amor, Ana María Orozco y Julián Arango, se conocieron mientras trabajaban en la telenovela “Tiempos difíciles” en 1995, pero fue en 1998, durante las grabaciones de “Perro amor”, que su relación floreció y se casaron en 1999, justo cuando comenzaban las grabaciones de “Yo soy Betty, la fea”, donde interpretaban a Betty y a Hugo Lombardi, respectivamente.
Sin embargo, el matrimonio de Ana María y Julián solo duró diez meses, pues terminó en el año 2000. Y la separación fue notoria, no solo por lo breve del matrimonio sino porque ocurrió en media grabación de la exitosa telenovela.
Se dice que el hecho impactó gravemente el ambiente en el set de grabación. Según diversos testimonios, la tensión era palpable y afectaba a todo el equipo de producción. Arango, en particular, solicitó en varias ocasiones a la producción que se pospusieran las escenas en las que tenía que interactuar con Orozco para minimizar el malestar.
Y para ser más específicos, se comenta que uno de los aspectos más incómodos de este proceso fue cuando el personaje de Arango, Hugo Lombardi, debía insultar a Betty en distintas escenas, ya que muchas veces no pudieron evitar que sus emociones personales interfirieran en su trabajo. E incluso, Orozco llegó a llorar tras estas grabaciones, evidenciando el difícil momento que atravesaba.
Y solo para aclarar rumores, la relación entre ellos no falló por una infidelidad, como muchas opiniones señalan. El mismo actor aclaró en entrevistas posteriores que la separación se debió más a un desgaste natural de la relación en medio del “tsunami de popularidad”, que experimentaban mucha gratitud a la telenovela. Sin embargo, Ana María sí inició una nueva relación después del divorcio y fue con el fotógrafo Pedro Franco.