La peligrosa dieta que hizo Kim Kardashian para lucir el vestido de Marilyn Monroe en la Met Gala

Redacción Hogar
Kim Kardashian junto a su novio Pete Davidson llegan a la alfombra roja de la Met Gala 2022.

Kim Kardashian es una de las reinas de la alfombra roja y si se trata del Met Gala, el escaparate más importante del mundo de la moda, ella busca robar flashes. Este año usó un vestido icónico, el que lució Marilyn Monroe para cantar “Happy Birthday, Mr. President" al entonces presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy.

El “glamour dorado” de entre 1870 y 1890 fue el código de vestimenta elegido para este evento, el cuál seguía el hilo conductor “la moda americana” y Kim decidió que no había nada más americano que el vestido que lució Monroe, el cual forma parte de la historia de Hollywood y fue vendido por 4,81 millones de dólares en el 2016, alcanzando un récord como la prenda más cara.

Para lograr entrar en esta pieza que generalmente se exhibe en el Ripley's Believe It or Not! Museum de Orlando, Florida, ella tuvo que hacer una dieta muy restrictiva, solo así logró bajar 15 libras en tres semanas.

Kim ya dijo a los medios que no tenía un plan B. "Cuando no me quedaba bien quería llorar, porque no se puede modificar en lo absoluto", reveló.

Una dieta extrema, en la que la influencer solo se alimentó de verduras y proteínas, así como el uso de un “traje sauna” durante su rutina de ejercicio, fueron la formula en que logró reducir.

La dietista Nichola Ludlam-Raine, experta en crear planes de alimentación personalizados, explicó a la publicación Insider que este tipo de dietas no son saludables, ya que al eliminar totalmente los carbohidratos lo que se pierde es agua, no grasa. Además que este grupo alimenticio es necesario para aportar energía.

Kim dijo: “No me morí de hambre, pero fui muy estricta. Solo comí las verduras y proteínas más limpias”. Un mensaje que la nutricionista tilda de peligroso, ya que su mensaje puede llegar a personas con trastornos alimenticios, la experta expresa que la pérdida debe ser lenta y sostenible.

Con respecto a las prendas de PVC que cumplen la función de sauna, indicó que el uso de este tipo de trajes combinado con la reducción de carbohidratos conducen a la pérdida de agua del cuerpo y no de grasa.