Desahogo o expresión artística: el debate tras la sesión musical de Shakira y BZRP
Shakira se convirtió en el tema del momento tras lanzar su colaboración con el productor argentino Bizarrap, una canción que recoge dedicatorias claras hacia su expareja Gerard Piqué y su nueva novia. El éxito del sencillo atrajo opiniones divididas por parte de los internautas, iniciando un amplio debate: ¿su música es una forma de expresión o un retrato del despecho?
Para la psicóloga Cecilia Bayas, la postura de Shakira muestra a una persona “respirando por las heridas”, que genera una ola de identificaciones hacia el orgullo femenino actual. Sus letras no solo serían una forma de canalizar su dolor, sino también un reflejo de su búsqueda por ser la voz de las mujeres.
“[Muestra] a una mujer empoderada que no necesita de una pareja más que para el amor, la compañía, la fidelidad y la exclusividad. No por el dinero”, aseguró para Revista Hogar.
Más allá de las posturas profesionales, existen una serie de opiniones que rayan en la brecha generacional. Según Belén D. (25 años), que Shakira haya escrito versos tan crudos no es algo nuevo, puesto que “siempre ha plasmado sus sentimientos a través de sus canciones”. Para ella, la barranquillera encuentra en la música una forma de sanar su dolor y generar ingresos. “Está de más decir que con esa canción acabó a Pique, pero ¿qué esperaba de una compositora como Shakira?”, dijo.
Sin embargo, para muchos la situación no se trata únicamente de un conflicto entre pareja o un desahogo de emociones, sino que también se convierte en una repercusión directa para los hijos de estas estrellas.
Ana G. (20 años) considera que Shakira “cayó muy bajo” al realizar su colaboración con Bizarrap. Según mencionó, si bien piensa que las aparentes acciones de Piqué son “imperdonables”, lanzar tres canciones en torno a la temática no es sano. “Es una madre y no se debería permitir hacer esas cosas, por sus hijos. Es un poco ridículo”, dijo.
Algo similar opinó Carlos H. (52 años). Durante una conversación con este medio, mencionó que su principal pensamiento ante el conflicto entre la intérprete y el jugador son los niños, puesto que a pesar de los problemas personales “no vale poner a los hijos en medio”.
Dentro de la industria, hablar del despecho, el dolor, y las rupturas amorosas es algo común. Varios son los artistas que deben sus más grandes éxitos al desamor. Sin embargo, para el productor de espectáculos y músico, Javier Cueva, la lírica empleada por la intérprete es infantil. “No va acorde con su jerarquía humana y su jerarquía artística”, explicó.
Aunque las letras sobre corazones rotos han sido un sello característico de Shakira desde sus inicios, Cueva asegura que sus sentimientos actuales no pueden ser los mismos a los que tuvo cuando pasó por una ruptura en la adolescencia.
“Esta lírica es válida en esta época y en todas las épocas, pero no creo que ella lo haga por vender, creo que ella lo hace porque está en el proceso normal de un rompimiento en el que empiezas a despertar y a ver la realidad de tu situación”, explicó.