Carolina Aguirre Miss Ecuador 2012, dedicada al arte y la comunicación

Carolina tiene 32 años y parece de 20. Su casi metro ochenta de estatura y su cabellera rubia rizada le confiere el eterno status de Barbie ecuatoriana capaz de enternecer el público cantando baladas o interpretar a Rapunzel en distintos teatros del país. Caro es un sello de dulzura y seriedad en un país donde muchas modelos se pierden en la codicia.

La co-presentadora del programa de Ecuavisa “Panorama Internacional” desde hace cinco años es práctica y descomplicada como su padre ecuatoriano y tiene la sensibilidad y el perfeccionismo de su madre argentina Mariel Córdoba que le enseñó el canto y el dominio escénico. Desde niña Carolina la acompañó y siempre supo que el público la iba a ser grande.

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Es con esta mentalidad que la soprano se atrevió a presentarse en el certamen de Miss Ecuador. “No me interesaba ser la más bonita, solo anhelaba ser alguien para la gente y poder trabajar lo más pronto”, comenta la periodista graduada hace más de diez años luego de estudiar en el colegio Nuevo Mundo.

El 19 de diciembre de 2012, Carolina representó Ecuador en el certamen de Miss Universo en Las Vegas, Nevada y a pesar de no haber llegado a las instancias finales, Donald Trump, el dueño del concurso, le propuso radicarse en Estados Unidos para ser modelo en desfiles de moda en Nuevo York.

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La joven guayaquileña dio un no rotundo, regresó a Ecuador y se preparó para ser comunicadora, actriz y evolucionar como cantante. En más de una década demostró ser perfeccionista al aceptar los únicos proyectos donde podía aprender sin perder su esencia. Fue una jueza muy recordada en “Ecuador tiene talento”, presentadora en “En Contacto”, imagen de Yanbal y dio un sinnúmero de conciertos donde evidenció su evolución del pop hacia el jazz y el Rock clásico.

En el ámbito personal Carolina es de pocos amigos e intenta dar pasos firmes en la vida. Se casó a los 25 años con el hombre que considera su complemento perfecto. “Jonathan es perfil bajo y acepta lo que significa mi trabajo. Me apoya, me alienta y me escucha cuando tengo mucha ansiedad. Le gusta el teatro, el buen cine. De hecho la última prueba antes de casarnos fue ver juntos “Lo que el viento se llevó”. ¡Y le gustó!”, recuerda entre risas. “También somos aficionados a ‘Naranja mecánica’ y de ‘El padrino’”, añade la madre de Emilia y Luciana.

Carolina es una mamá atenta y detallista y le gusta que sus hijas la acompañen en sus ensayos. “No viene de mí, ellas me lo piden y me gusta que sea así”, asevera. De la maternidad aprendió a convivir con la depresión postparto y los males que solo un sicólogo puede sanar: “El nacimiento de mis hijas siempre será el momento más intenso y lindo de mi vida pero me tocó lidiar con una depresión muy fuerte. Cuando nació mi segunda hija supe reconocer los síntomas y pedí ayuda inmediatamente. No podía dejarme vencer. Fue un impulso para seguir”.

¿Qué viene a futuro para Carolina? La respuesta estaba escrita hace tiempo. “A los 15 años hice parte del elenco de High School Musical de Danzas Jazz y conocí a Gabriela Andrade. Hoy tiene su productora y en diciembre seré una de sus estrellas en un show que recordará un personaje icónico de Disney”, cuenta la eterna princesa periodista.

“Y surgió la misma magia en el periodismo y el modelaje, imagínate que hice mi primera portada para la Revista Hogar a los 16 años y cuando me reuní con mi mamá y el dueño de Ecuavisa me dijo que me vería muy bien en un programa como ‘Panorama Internacional’ que recién se estrenaba...”. Quince años después Caro acompaña a Alfredo Pinoargote en la presentación de Panorama Internacional y ensaya para ser una princesa en el teatro musical que tanto adora. El cuento de hadas ya estaba escrito.