Estudio revela que el agua dulce en Ecuador se redujo en 4% en los últimos 23 años
Los datos de agua superficial recogidos por la iniciativa MapBiomas Ecuador mostraron que en el país existe una tendencia a la disminución de la superficie de cuerpos de agua naturales en un 4,25% durante los últimos 23 años (2000-2023).
Ecuador atraviesa actualmente una crisis energética con apagones diarios desde mediados de septiembre que han llegado a ser de hasta 14 horas al día, debido a una sequía histórica en las zonas donde se asientan sus principales centrales hidroleéctricas.
En lo que se refiere a la región de costa del país la tendencia tiene sentido opuesto, pues se registró un aumento de 51.431 hectáreas, de las que un 61,4% están asociadas a actividades acuícolas como camaroneras.
Entre los datos recogidos por MapBiomas Ecuador también se mostró la pérdida de glaciares en un 35%, unas 3.033 hectáreas, en el contexto de cambio climático y aumento global de la temperatura.
Uno de los casos más representativos del país es la pérdida de superficie total del complejo de glaciares del volcán Carihuairazo, situado en el centro de los Andes de Ecuador, que en 1985 cubría 69,1 hectáreas.
Por su parte, el volcán Iliniza Sur, próximo a la capital ecuatoriana, registró una pérdida del 81,2 % de la superficie de sus glaciares en los últimos 39 años.
Otro espacio como la laguna de Colta ha perdido el 55,8 % de su superficie en ese período de tiempo, mientras que embalses para el uso de recursos hídricos, como la laguna de Mica, muestran dinámicas distintas con tendencias al aumento en la superficie.
MapBiomas también apreció un aumento de cuerpos de agua antrópicos, aquellos que son creados por el ser humano como los embalses o las presas, que se concentró en la zona costera del país y en zonas vinculadas con la actividad minera, especialmente en aquellas cercanas a las laderas de la cordillera Oriental y en la Amazonía.
Respecto a la vegetación, Ecuador perdió 1,1 millones de hectáreas de cobertura natural entre 1985 y 2023, de las cuales 981.000 eran superficies boscosas, según mostraron datos de la segunda colección de cobertura y uso del suelo de MapBiomas Ecuador.
De acuerdo con esta investigación, el 31,7% del país sufrió transformaciones a causa de acciones humanas como uso agropecuario, silvicultura, minería, infraestructura urbana y acuicultura, lo que ha provocado deforestación.
Entre 2022 y 2023 se incrementaron en un 26% las hectáreas utilizadas por la actividad minera hasta llegar a ocupar cerca de 13.000 hectáreas, tras sumar en este ultimo año 2.673 hectáreas nuevas, según indicaron los datos recogidos.
Por su parte, la superficie de uso agropecuario y silvicultura creció en 1,03 millones de hectáreas entre 1985 y 2023.
Sin embargo, el proyecto de MapBiomas resaltó que al país le queda un 68,2% de su territorio (17,5 millones de hectáreas) con coberturas naturales de las cuales 12,8 millones de hectáreas son coberturas boscosas y 1,1 millones de hectáreas son herbazales.
Los datos de las iniciativas de cobertura y uso del suelo y agua son resultado de la colaboración entre la Red Amazónica de Información Socioambiental Georreferenciada (RAISG), consorcio de organizaciones de la sociedad civil de los países amazónicos orientados a la sostenibilidad socioambiental de la Amazonía, y la Red MapBiomas, una iniciativa que envuelve a una red colaborativa de especialistas de cada uno de los países miembros en temas como uso del suelo, sensores remotos y programación.