Aprendiendo sobre el ACV y cómo prevenirlo
* PUBLIRREPORTAJE
El ACV es una emergencia médica que requiere atención inmediata. Existen alertas tales como el dolor de cabeza intenso, falta de concentración, dificultad para hablar, pérdida de fuerza muscular, caída de la cara; entre otros síntomas que pueden ayudar a identificarlo a tiempo. Sin embargo, también hay factores preventivos que pueden evitar su padecimiento.
El Accidente o Ataque Cerebrovascular (ACV) es una condición que se puede agravar si la persona no aprende a reconocer las alertas que lo han desencadenado. Por eso, es importante trabajar en la prevención. Se trata de un padecimiento, sin duda, desconocido por muchas personas en el Ecuador.
Según estudios especializados, son varios los factores de riesgo que pueden desencadenar un ACV entre los que se encuentran la hipertensión, diabetes, tabaquismo, obesidad y sedentarismo; condiciones que pueden controlarse a tiempo y disminuir ese riesgo. Asimismo, existen factores preventivos como mantener una dieta equilibrada y realizar ejercicios físicos constantemente, además de contar con una correcta medicación y/o control de otras enfermedades.
¿Qué es un ACV?
El Accidente o Ataque Cerebrovascular se genera cuando el flujo de sangre se detiene en una parte del cerebro, debido a la obstrucción por un trombo (coágulo de sangre), por consiguiente la zona afectada no recibe nutrientes y oxígeno. Como consecuencia, las células cerebrales dejan de funcionar. Según los especialistas, por cada minuto que pasa durante un cuadro de ACV, pueden llegar a morir hasta 2 millones de neuronas. Por este motivo, quién sufre este ataque debe ser trasladado inmediatamente hacia una unidad de salud, antes de las 4.5 horas, a fin de reducir la posibilidad de secuelas permanentes.
La Dra. Jeanneth Morales, Jefe de Emergencia del Hospital de Especialidades de Fuerzas Armadas Nro. 1 de Quito, hace un repaso por cuáles son las recomendaciones para tener en cuenta y saber cómo reaccionar ante un caso de ACV propio o de alguna persona cercana.
1. Mantenga la calma: Es muy importante en el caso que el paciente se encuentre solo. Asimismo, si está acompañado por un familiar, se recomienda transmitir al paciente tranquilidad y calma.
2. Aprenda a identificar síntomas: El reconocimiento de los síntomas de esta enfermedad es sumamente importante. Muchas veces, y dependiendo el caso del ACV, hay alertas como un dolor de cabeza intenso, caída de la cara, falta de concentración, pérdida de fuerza en alguna parte del cuerpo, entre otros síntomas. Por lo tanto, ante cualquier sospecha, pídale al paciente que realice las siguientes acciones:
• Sonreír: Si presenta un lado del rostro caído o sin movimiento, es un indicador de la enfermedad.
• Levantar un brazo: Si no lo puede hacer por falta de fuerza también es un indicio de ACV.
• Decir una frase corta: Atento si el paciente manifiesta dificultad para hablar o lo hace incoherentemente, también es una sospecha.
3. Si identifica alguno de los síntomas hay que ¡ACTUAR CON VELOCIDAD! y solicitar apoyo médico inmediato: llamar a emergencias para que el paciente sea evaluado por un especialista de manera urgente.
4. Mientras llega la atención móvil:
• Acueste a la persona, colocándola en posición lateral para evitar que la lengua obstruya la garganta.
• No medique al paciente
• Si el paciente para de respirar, realizar maniobras de reanimación hasta que llegue el especialista o se acuda a un centro de salud.
Ante un ACV, actuar rápido puede salvar vidas, por eso es importante enfatizar que la prevención es clave para evitarlo. Por eso:
– Se debe mantener controlada la presión arterial.
– Realizar actividad física constantemente.
– Evitar el consumo excesivo de alcohol y cigarrillos.
– Mantener los niveles normales de azúcar y colesterol en la sangre.
– Seguir una dieta saludable.
Es importante que, aquellas personas que tengan más de 55 años, especialmente hombres, y/o que cuenten con un antecedente familiar de ataque cerebral, opten por chequeos periódicos de control.
Con la finalidad de aumentar el número de pacientes que reciben tratamiento en hospitales y cambiar el paradigma de la forma en que se atiende el ACV, nace Angels, una iniciativa global que proporciona educación médica continua y herramientas que ayudan a los centros de salud a estandarizar sus procesos de atención y así salvar más vidas. El proyecto está presente en 95 países en 3 continentes: Europa, Asia y América; conformando la más grande red de centros hospitalarios calificados (2,522) para atender el ACV. Se puede conocer más de esta iniciativa ingresando a https://es.angels-initiative.com/
Para más información sobre el ACV y cómo prevenirlo, visita en las redes sociales la página de Actúa Con Velocidad en Instagram: @actuaconvelocidad y Facebook: Actúa con Velocidad.