Laptops definitivas
2016/12/0603:06H.
A finales de octubre, Microsoft y Apple presentaron sus más recientes laptops. De inmediato, la prensa tecnológica empezó a hacer comparaciones, tratando de encontrar cuál es la portátil “definitiva” de 2016. La más comentada fue la de Apple. La edición 2016 de la MacBook Pro, la portátil insignia de la compañía fundada por Steve Jobs, llegó después de una expectativa acumulada por casi cuatro años. El modelo había recibido su última actualización mayor en 2012, con la adición de la pantalla “Retina”.
Desde entonces, la MacBook Pro había cambiado poco: más allá de mejoras internas y un cuerpo más delgado, en esencia, su propuesta seguía siendo la misma. El modelo que llega a las tiendas en noviembre, sin embargo, marca un punto de quiebre en la historia del dispositivo, proponiendo un diseño renovado que ha generado tanto críticas como elogios. La novedad principal de la nueva MacBook Pro es una pantalla táctil ubicada sobre la sección superior del teclado, en el lugar donde tradicionalmente se encontraban las teclas de función (del F1 al F12).
Conocida como Touch Bar, este nuevo artilugio es “más versátil y capaz” que los botones a los que reemplaza, explican desde Apple. Los creadores del equipo sostienen que la barra es de naturaleza interactiva, es decir, cambia automáticamente dependiendo de lo que esté haciendo el usuario para mostrarle diferentes herramientas
Cuando se está navegando a través de una galería de fotos, por ejemplo, la Touch Bar muestra la totalidad de las imágenes contenidas, para que el usuario pueda ver el orden de las mismas incluso antes de que aparezcan en pantalla. La renovación del teclado ha generado críticas divididas, como la de Joe Osborne de TechRadar, quien argumenta que a pesar de que la Touch Bar tiene un diseño inteligente y es “cool” para usar, por ahora es difícil encontrarla “extremadamente útil”.
Un aspecto de la nueva MacBook Pro en donde sí parece haber consenso entre los comentaristas tecnológicos es la falta de conexiones compatibles con estándares actuales. Las recientes portátiles de Apple no tienen conectores USB tradicionales, requieren un adaptador para usarlos. En su lugar, emplean puertos USB-C (más pequeños).
Convertible
A ese problema no se exponen los compradores de la nueva Surface Book i7 de Microsoft. Su apuesta se encamina hacia lo híbrido. Es una computadora portátil cuya pantalla táctil puede desprenderse del teclado para usarse como una tableta.
Es un diseño que originalmente se empezó a usar el año pasado, cuando la línea Surface Book fue revelada. La edición 2016, ha sido “rediseñada desde el interior”, indican desde Microsoft, para darle “las capacidades de una laptop de alto rendimiento y la versatilidad de una tableta”. Uno de los aspectos diferenciadores de la Surface Book es su capacidad de interactuar con herramie
ntas externas que modifican las interacciones con el hardware.
Una de ellas es el Surface Pen, un lápiz óptico que viene incluido con el equipo, el cual permite “dibujar y diseñar” libremente sobre la pantalla. Asimismo, Microsoft anunció que la Surface Book será compatible con su Surface Dial, una rueda de control que al ubicarse sobre la pantalla de la máquina despliega un menú radial, a fin de que el usuario pueda seleccionar colores o hacer otras tareas con una mano mientras con la otra trabaja con el lápiz óptico. La rueda, que se vende por separado, también sirve para hojear documentos o “rebobinar” un trabajo hacia una versión anterior.
Para Kevin Lee, analista de TechRadar, la Surface Book trae varias innovaciones tecnológicas al campo de las laptops, pero su mayor fortaleza es que es “en general, un dispositivo estupendo”. Por ahora, no obstante, en cuanto a ventas, Apple le está ganando el duelo a Microsoft. Un reporte de la compañía de análisis de mercados Slice Intelligence informa que “en sus primeros cinco días de disponibilidad, los compradores digitales de Estados Unidos han gastado más dinero en la nueva MacBook Pro que en cualquier otra laptop en 2016”.