Ciberdelincuentes utilizan una nueva modalidad de extorsión con imágenes hechas con inteligencia artificial
El constante avance de las herramientas basadas en inteligencia artificial (IA) ha brindado a los ciberdelincuentes una oportunidad para mejorar sus ataques mediante la fabricación de imágenes y vídeos, aumentando el impacto de sus chantajes y extorsión.
El FBI ya emitió una advertencia sobre esta preocupante situación, informando que el uso creciente de imágenes y vídeos públicos manipulados por parte de actores maliciosos en campañas de sextorsión. La institución detalló que se ha reportado numerosos casos en los que las víctimas han sufrido la manipulación de su contenido visual para crear material sexual falso.
Las imágenes sin ediciones, las obtienen mediante las publicaciones en redes sociales, fuentes públicas o incluso son proporcionadas por las víctimas.
“En los últimos años hemos visto muchas campañas de sextorsión en las cuales los delincuentes envían correos personalizados intentando asustar a las víctimas haciéndoles creer que han sido víctimas de una infección con un malware que permitió a los cibercriminales grabar videos íntimos utilizando la cámara web de la víctima”, indició Camilo Gutiérrez, jefe del laboratorio de investigación de la compañía especializada de ciberseguridad ESET Latinoamérica.
Lea también: ¿Cómo saber si estás en la mira de los ciberdelincuentes?
El objetivo de los ciberdelincuentes es hacer que las personas envíen dinero para evitar la supuesta circulación de dicho contenido manipulado en Internet. Lamentablemente, muchas personas han caído en este engaño.
“La forma de robar el dinero puede variar, desde el depósito de determinada suma en criptomonedas en una billetera virtual a demandar el envío de gift cards”, aseguró el experto.
En la actualidad, existen numerosas herramientas y aplicaciones disponibles de forma gratuita en repositorios públicos, como foros clandestinos, que facilitan la creación de deepfakes, una técnica de IA que crea videos o imágenes falsas. Generando que cualquier individuo tenga el alcance y capacidad de generar estos contenidos manipulados.
Varios países han están tomando medidas para minimizar el uso de estas deepfakes. Al menos en Reino Unido han creado una ley que sanciona a quiénes compartan estos contenidos falsos.