Pescadores industriales y artesanales buscan la sostenibilidad del atún
La pesca del atún tiene un peso importante en la balanza comercial de Ecuador. Se estima que su captura y procesamiento genera más de 250.000 empleos, tanto en el sector industrial como artesanal.
Los estándares de calidad, sostenibilidad y su enfoque en la conservación de los recursos marinos, le han permitido a la industria atunera ecuatoriana acceder a mercados exigentes y competitivos a nivel internacional. Actualmente, las flotas de seis empresas miembros de la Fundación Tunacons, cuentan con la certificación Marine Stewardship Council (MSC) para el atún aleta amarilla y barrilete. Para finales de este año se prevé extenderlo para el patudo.
Guillermo Morán, director de la Fundación, señala que gracias a los esfuerzos realizados se ha alcanzado un estado saludable en las poblaciones de túnidos y reducir la pesca incidental de otras especies como tortugas, tiburones y mantarrayas.
“Tunacons es reconocida por la Comisión del Atún por presentar propuestas y desarrollar proyectos como los plantados biodegradables, buenas prácticas de pesca y por colaborar con la ciencia para evaluar el estado de estas poblaciones”, señaló el directivo, durante el Tuna Fest, evento organizado por la Fundación junto a la Cámara Nacional de Pesquería (CNP), por conmemorarse el Día Mundial del Atún.
En el encuentro participó también el sector pesquero artesanal, el cual desea aplicar algunas de las iniciativas adoptadas por sus pares industriales. Grace Unda, Directora de la Corporación de las Asociaciones de Pesca Artesanal de Galápagos (CORPAG), comentó que firmaron un memorándum de entendimiento con el que aspiran conocer las mejoras que se han logrado con la certificación MSC, a fin de adaptar un modelo similar en el archipiélago.
Lea también: Día Mundial del Atún: Ecuador es el segundo mayor exportador
“La pesca artesanal en las islas genera actualmente cerca de 1.000 empleos y aporta con el 3 y 4% de su economía. La actividad está permitida únicamente para residentes y ésta no afecta al ecosistema, la mayor parte de la captura es para consumo local y una pequeña parte se entrega a hoteles de Quito y Guayaquil”, expresó.
Unda mencionó que, antes de la pandemia, este sector generaba el 7% del PIB del archipiélago, pero que éste se ha ido reduciendo en los últimos años, por lo que aspiran a recuperar esos porcentajes, a través de la promoción de su pesca fresca en el mercado nacional.
Tuna Fest fue precisamente un espacio para dar a conocer su producto. Al evento acudieron varios representantes de restaurantes y hoteles, quienes realizaron degustaciones, tanto de la oferta de lomos frescos como en conserva.
Guillermo Morán, manifestó que la demanda de atún fresco está creciendo a nivel mundial, especialmente por parte del mercado estadounidense.
“La pesca artesanal y de altura captura aproximadamente alrededor de 4 o 5 millones de kilogramos por año. La actividad es muy importante para las comunidades de Manta, San Mateo, Santa Marianita, Jaramijó, Santa Rosa de Salinas y Anconcito... Hemos hecho estas reuniones para que ellos puedan tener nexos con restaurantes y hoteles, para que puedan vender directamente su atún”, destacó.
Lea también: Ecuador encabeza Comisión Interamericana del Atún Tropical