Nuevos sabores y experiencias ofrece la coctelería local
La coctelería tradicional ha ido innovando con el pasar de los años, por lo que hoy es posible degustar de cocteles que reinterpretan las bebidas clásicas con el uso de ingredientes históricos o locales que ofrecen nuevas experiencias sensoriales. Así como los que se inspiran en leyendas y costumbres o aquellos que imprimen una marca y sello propio.
Esta gastronomía líquida es una tendencia a nivel mundial y Ecuador también la empieza a experimentar. En el corazón de la calle Panamá en Guayaquil, por ejemplo, la Casa de Bebidas Nicanor ofrece desde hace un año una nueva experiencia de bar de gran nivel por su variedad de coctelería.
Cambalache Mule, inspirado en las idas y vueltas a los mercados del centro de Guayaquil, donde encuentras de todo y siempre regateando el precio, el Diablo Huma, Playa Bruja, Murú y Shungo son algunos cocteles que se pueden degustar.
“Hemos logrado marcar un antes y después en la escena de la coctelería en Guayaquil, siempre enfocándonos en resaltar nuestra materia prima y productos frescos locales, así como personalizar el servicio”, indica Andrés Damerval, socio y Bar-manager de Nicanor.
Para él y sus socios, Miguel Ponce y José Fernando Pérez, la oferta del lugar busca reflejar lo que existe en las grandes ciudades, un lugar en el que tomar un trago sea una experiencia para disfrutar y compartir. “Nos enorgullece estar impulsado un cambio hacia una coctelería dinámica que valora el producto local de calidad”, agrega Pérez.
Ponce, quien además es chef de Nicanor, resalta que en poco tiempo el sitio ha logrado ser destino pionero para disfrutar de manera integral de una buena bebida con una variedad de platos.
El establecimiento exhibe actualmente más de 28 cocteles y más de 90 licores diferentes. Las bases de licores más pedidas son el Gin, el ron y el whiskey. Los productos destilados locales como es el caso del Miske (agave andino), también son populares.
Su carta es una guía para los clientes, si alguien busca un coctel de un perfil de sabor distinto al que se ofrece o quiere un Old Fashioned (coctel clásico) se lo prepara. La propuesta de bebidas se cambia mínimo dos veces al año, de acuerdo a los sabores de la temporada vigente y junto a esta el menú también rota.
“La cultura del buen beber también es importante para nosotros. Desde Nicanor el enfoque siempre ha sido enseñar a la gente a beber bien, responsable y a consumir de manera local”, sostiene Damerval.
En septiembre pasado esta Casa de Bebidas fue sede del ‘Negroni Week’, un evento anual en el que bares y restaurantes del mundo celebran al coctel Negroni, considerado uno de los mejores a nivel mundial.
En esta cita se degustaron más de diez tipos de Negronis, incluyendo recetas exclusivas de bares de Ecuador (Nicanor), Argentina (Casa Cavia), Chile (Bar La Providencia), Perú (Lady Bee) y Colombia (Alquimia Speakeasy).
Congreso
En octubre pasado se realizó la primera edición del congreso de Rum & Gin en el rooftop del Centro Comercial Alhambra en Guayaquil, el cual contó con la participación de varias marcas y del Ron Flor de Caña, un licor nicaragüense cuya filosofía está orientada en la sostenibilidad, la herencia familiar y el proceso natural por el cual es extraído.
El evento estuvo direccionado hacia un público aficionado por el ron y la coctelería. Dentro de esta jornada se desarrollaron charlas educativas, concursos de mixología, catas de rones Premium y degustación para exponer la versatilidad de las distintas marcas.
Fernando Vivanco, gerente de marketing de Ron Flor de Caña en Ecuador, comenta que la marca ha logrado desarrollar un vínculo con el consumidor, gracias a su filosofía y buenas prácticas, pues cuenta con la Certificación Carbono Neutro y sigue un proceso natural para ser añejado sin emplear ingredientes artificiales ni azúcar.