Institutos ofrecen la posibilidad de validar trayectoria profesional
Entre las principales razones por las que las personas acceden a una validación profesional están la búsqueda de un ascenso laboral y una mejor retribución salarial.
La validación de conocimientos de una trayectoria profesional consiste en la homologación de una destacada experiencia, relacionada al ámbito laboral, artístico o cultural, y cuya verificación está a cargo de una Instituto de Educación Superior (IES) acreditado.
De acuerdo a la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt), los institutos particulares pueden efectuar la validación con base a su autonomía y luego de la aprobación de su reglamento interno, éste deberá ser presentado al Consejo de Educación Superior (CES).
En el caso de los institutos públicos, existe un reglamento de validación de trayectoria en el campo de las artes, mientras que para otras carreras, la Senescyt está preparando un reglamento, el cual se prevé que esté terminado en el primer trimestre de este año para luego ser enviado al CES. De forma que todas las instituciones acreditadas podrán brindar esta oportunidad de profesionalización.
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Alejandro Ribadeneira, secretario de la Senescyt, afirma que usualmente las carreras que están inmersas en este proceso pertenecen a diversas áreas tecnológicas, de administración o inclusive áreas muy específicas de la salud. Sin embargo, no todas las áreas de la salud o de derecho estarían facultadas para su validación.
En el caso de Humane Instituto de Negocios, hay la disponibilidad de realizar un programa de Validación Profesional, desde finales del 2018, para la Tecnología Superior en Administración y, desde mediados del 2020, para las carreras de Técnico Superior en Ventas y Tecnología Superior en Logística en Abastecimiento y Distribución.
Para aplicar al programa, los postulantes deben ser bachilleres que tengan al menos 28 años de edad y cinco años de experiencia laboral en el área afín a la carrera a cursar. Lorena Sánchez, directora académica de Humane, menciona que todos los candidatos deben cursar un programa personalizado para su carrera, donde reciben una nivelación de conocimientos.
Partiendo de las experiencias laborales de los aspirantes, se realiza la revisión de 12 temas alineados a las materias a homologar, durante ocho semanas, con contenido útil para la construcción de un Proyecto integrador de Competencias. “El proyecto consiste en un trabajo en el que se aplican todas las metodologías aprendidas en el programa, al conocimiento empírico que traen los participantes y con ello se los evalúa y se homologan 12 asignaturas, donde ganan un año de estudios de la carrera que vayan a cursar”, explica Sánchez.
Con esta homologación, a los postulantes les queda por cursar un año de estudios para obtener el título de técnico y un año y medio para el título de tecnólogo. Gracias al vínculo que existe entre la empresa privada y la academia, en la actualidad, la mayor cantidad de los estudiantes que han accedido a este proceso provienen de empresas como Arca Continental y Difare, aunque también están inscritos otros estudiantes de empresas como Ocean Security, Biomar, De Prati, entre otras.
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Múltiples opciones
En la práctica, cada Instituto cuenta con un programa de homologación autónomo, de acuerdo a su coordinación y experiencia.
Ramiro Pastás, vicerrector académico del Instituto Tecnológico Ecuatoriano de Productividad, ITSEP, afirma que como la mayoría de los alumnos que optan por esta modalidad tienen experiencia en su área de formación, no existen inconvenientes en su adaptación estudiantil. “Más bien, la academia aporta con procesos y procedimientos más técnicos y con rigurosidad científica, de manera que se puedan adaptar coherentemente con la práctica que ellos realizan en sus empresas”, explica.
En el Curso de Actualización de Competencias Profesionales, los estudiantes reciben cinco módulos con las temáticas necesarias para nivelar sus conocimientos académicos.
Luego de aprobar los cursos, los estudiantes pueden matricularse en el penúltimo nivel de su carrera y en el último, podrán realizar su trabajo de titulación a través de dos vías que pueden ser, a través de la resolución de casos empresariales o la creación de su Mipyme. En el 2021, el ITSEP inició este proceso con dos grupos en la carrera de Procesamiento de Alimentos.
Para este periodo 2022 el instituto ha diseñado la misma estrategia para las carreras de Administración, Marketing, Educación Inclusiva, Asesoría de Imagen y Promoción de la Salud. Aunque existen varias ventajas alrededor de la homologación profesional, la deserción estudiantil es una problemática de la cual las Instituciones de Educación Superior no están exentas.
En ese sentido, Ramiro Pastás afirma que el porcentaje de ausencia es mínimo. “Podríamos mencionar que, de 45 estudiantes, la deserción ocurre en tres alumnos, es decir que ni llega al 10 por ciento”, explica. Una de las principales causas del retiro es la falta de recursos económicos, ya que en ocasiones los estudiantes se quedan sin empleo.
*Lea este y otros temas del especial de Institutos en Revista Enfoque, ya en circulación con Revista Vistazo.