Embutidos, compañeros infaltables en la parrilla
De acuerdo con el documento Guía de fabricación de embutidos, en promedio un ecuatoriano consume 4,1 kilos de estos productos cada año (cifras al 2017).
En ese periodo, las ventas de embutidos se elevaron hasta en un 14 por ciento en algunas industrias del país y se estimó una producción anual de más de 30 millones de kilos.
Junto con la carne, los embutidos son infaltables en el ‘plan parrillero’ de los ecuatorianos. Así lo afirma Leandro Buratovich, de ascendencia argentina, accionista del restaurante SUR parrilla gourmet.
“En Ecuador, el 70 por ciento de una parrillada está compuesta por embutidos tipo salchichas, longaniza y otras, mientras que el asado argentino tiene más carne, chinchulines, riñones, provoleta”, asegura.
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Esto demuestra que la influencia gastronómica de los países del sur del continente se instauró en la cultura local, pero con nuestro estilo propio.
A partir de conocer las necesidades del consumidor y con el fin de satisfacerlas, Pronaca cuenta con un segmento específico para preparar a la parrilla: longaniza, morcilla, butifarra, chistorra, y variedad de chorizos como el paisa, para asado, cuencano, el parrillero y de especialidad como a las finas hierbas, jalapeño y cheddar.
Andrés Pérez, director de Relaciones Institucionales de la empresa, hace referencia a un estudio de Kantar World Panel, y explica que el cliente segmenta el consumo de embutidos según la ocasión: comidas cotidianas, especiales, eventos o celebraciones.
“En las ocasiones especiales predomina el consumo de parrilleros y la variedad que eligen depende de la ocasión y el tipo de preparación”, explica.
El mercado ecuatoriano cuenta con una variada oferta de embutidos, donde los llamados artesanales también tienen cabida. Daniel Buratovich, vio una oportunidad de emprendimiento con la charcutería, y desde hace siete años comercializa embutidos bajo la marca SUR.
Después de la pandemia del COVID-19 abrió SUR Carnicería Boutique, como un punto de venta de sus embutidos tradicionales; actualmente se comercializan también, algunos de ellos, en cadenas de supermercados a nivel nacional.
Su oferta es amplia, pero destacan el mix parrillero (diversos tipos de chorizos en un solo empaque), chorizo con pimiento morrón y queso provolone, chorizo con chicharrón colombiano, por mencionar algunos.
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De la oferta de productos que comercializa Macafri, como: chorizo parrillero, chorizo criollo, chorizo ranchero, olma, morcilla, longaniza, butifarra, salchichas, chorizo de pollo, chorizo ambateño, este último es el más consumido por sus clientes.
María Eugenia Estrada, ejecutiva de la empresa, afirma que esta preferencia se debe a que es un producto tradicional ecuatoriano.
A decir del representante de Pronaca, los hogares han retomado los hábitos que tenían antes de la pandemia y reunirse en casa para hacer una parrillada es uno de los más comunes, por lo que el consumo de la subcategoría de parrilleros, dentro del segmento de embutidos, es el que mayor crecimiento presenta. “En el 2022, registramos un incremento del 10 por ciento de ventas, en relación con el 2021”, menciona.
Los productos de esta empresa, preferidos por los comensales, son los chorizos en sus diferentes variedades. El sabor, aroma, grosor y tamaño, son los atributos por los que los ecuatorianos los eligen.
Esa preferencia se repite en los embutidos SUR, pero es el chorizo clásico argentino el que conquista el paladar de los comensales, junto con la butifarra, que tiene la misma materia prima que el chorizo pero más delgada.
Mientras siga el auge del gusto por la parrilla y el asado, la venta de embutidos propios para esta preparación seguirá creciendo, porque en una parrillada su sabor es sinigual.