Confianza inversora en el Ecuador se mantiene

Cecibel Serrano Zambrano
Oriental Industria Alimenticia invirtió dos millones de dólares en la adquisición de maquinaria para sus líneas de instantáneos y de láminas de masa precocida de harina de trigo fortificada. Foto cortesía.

Confianza. Es el factor principal para realizar inversiones en el mundo de los negocios y en Ecuador, varias empresas vieron la oportunidad de expandir su presencia comercial o su capacidad de producción a través de la ejecución de importantes proyectos.
 
Aunque el contexto actual, debido al impacto de la pandemia en la economía nacional, no parecía el momento más adecuado, se anunciaron varias inversiones en diferentes sectores productivos. Nuevos desarrollos inmobiliarios, apertura de centros comerciales y supermercados, construcción de fábricas de producción, entre otros anuncios, se realizaron entre el 2020 y el inicio del presente año.
 
Un ejemplo de esta dinámica es la construcción de una planta de abastecimiento, secado y exportación de cacao, de última generación, en el cantón Durán, a cargo de la firma suiza Barry Callebaut, uno de los fabricantes de chocolate más grandes del mundo.
 
Actualmente, la obra está avanzando en los cimientos y en la parte estructural, y se espera que la instalación esté lista a finales del presente año, con lo cual la empresa espera fortalecer su presencia en el mercado nacional. 
 
“Hemos obtenido cacao de Ecuador durante más de 20 años. El países uno de los orígenes de más rápido crecimiento y, como tercer productor mundial de granos de cacao a nivel mundial, es un origen clave para nosotros”, resalta Angela Gubser, directora General de Barry Callebaut Ecuador.
 
En los últimos años, la empresa extranjera aumentó su mano de obra de 7 a 20 empleados, comenzó a tener flujos contractuales y actúa como exportador de cacao desde enero 2018. Sus planes apuntan ahora a alcanzar una mayor participación de mercado.
 
“Para lograr esto, no solo exportaremos a través de nuestra propia infraestructura, sino que también continuaremos abasteciéndonos de nuestros proveedores existentes y estableceremos nuevas relaciones”, resalta Gubser, tras indicar que con la operación de la planta en Durán espera duplicar la fuerza laboral de la empresa en nuestro país.
 
 
Las empresas ecuatorianas también han apostado por el país, tal es el caso de Oriental® Industria Alimenticia, que invirtió dos millones de dólares en la adquisición de maquinaria de alta tecnología para sus líneas de instantáneos y de láminas de masa precocida de harina de trigo fortificada en su planta Estambul, ubicada en Los Ríos. “Esta importante inversión tuvo como objetivo incrementar nuestros volúmenes de producción, generar nuevas fuentes de empleo y satisfacer las necesidades de nuestros consumidores tanto a nivel nacional como internacional”, explica Yuri León, directora de la Unidad de Alimentos de la compañía.
 
En 2020, Oriental® Industria Alimenticia logró aumentar la producción de pastas y fideos, en especial, la línea de instantáneos. Para el presente año, la expectativa es lograr un incremento del 3 por ciento en sus ventas. “A pesar de las dificultades económicas producto de la pandemia, hicimos esta inversión, pues creemos firmemente que la industria alimenticia es clave en la reactivación económica y productiva del país”, resalta Yuri León.
 

 
De su parte, la productora y exportadora de banano Reybanpac emprendió en el presente año un plan maestro de renovación de sus empacadoras con el objetivo de lograr mayor eficiencia, seguridad y garantía en el procesamiento de la fruta.
 
Así, se aumentará la productividad, pues los trabajadores procesarán más cajas de banano dentro del mismo periodo de tiempo y de forma más cómoda, lo cual les permitirá mejorar sus ingresos por volumen.
 
“Otro de los beneficios es que facilitará una mayor trazabilidad de la calidad del producto, lo cual es muy relevante para los clientes, especialmente en los mercados más exigentes. Para ello el plan contempla herramientas tecnológicas como balanzas electrónicas, y sistemas informáticos para labores y control de calidad”, explica Hugo Carrillo, gerente de la Unidad de Negocios de Banano de Reybanpac.
 
El modelo de zona industrial unificada establece un mejor control de bioseguridad, ya que separa la plantación de todas las otras áreas de trabajo como oficinas administrativas, patio de racimos, empaque, paletizado, bodegas, comedor, etc. Asimismo, permitirá un mejor aprovechamiento de recursos como agua y energía.
 
Tras una evaluación, indica Carrillo, Reybanpac determinó aplicar el plan de renovación al 50 por ciento de sus empacadoras; y en algunos casos se definió reemplazar ciertas unidades con la construcción de nuevas instalaciones. El proyecto se extenderá por tres o cuatro años.
 
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