Bicicletas, electrodomésticos y otros bienes suben de precio por el alto valor de los fletes navieros

Desde finales de 2020, un notorio incremento en los costos de los fletes marítimos internacionales presiona al sector empresarial de Ecuador, pasando por valores mínimos de 1.331 dólares hasta más de 11.109. Es decir, un incremento de más de 700 por ciento, según datos de la Cámara de Comercio de Quito (CCQ), con base en el índice “Freightos Baltic Container Index”, que permite ver en promedio los precios de las 12 rutas más importantes a nivel internacional.

Una oferta insuficiente de contenedores y espacios en los buques, así como la apertura de la economía a nivel mundial, definieron este aumento, que afecta, tanto a importadores como exportadores generado dos efectos: “un aumento en los precios e incremento de los tiempos para conseguir transporte y, por ende, de llegada de los productos”, señala la CCQ.

Las rutas más afectadas por este incremento son China-Sudamérica y China-África Occidental, “debido a que los importadores de estas rutas no deben pagar solo por el envío de su contenedor lleno, sino también por el costo de enviar esos contenedores vacíos de regreso hacia China”, asegura el presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores – Fedexpor, Felipe Ribadeneira Molestina.

Lea también: Camarón ecuatoriano sumó más $5.000 millones en exportaciones en el 2021

¿BICICLETAS, EQUIPOS TECONOLÓGICOS, ELECTRODOMÉSTICOS Y OTROS BIENES MÁS COSTOSOS PARA EL PÚBLICO?

La respuesta es sí. Importadores reconocen que el costo de los fletes navieros ya se refleja en el precio para los consumidores. Erick Aldas, importador de equipos tecnológicos, explica, por ejemplo, que antes de 2020, una silla ‘gamer’ costaba alrededor de 140 dólares y que ahora supera los 200 dólares. A esto le suma que algunos fabricantes de equipamientos tecnológico subieron el valor de los productos por la dificultad y costo de trasladar las materias primas vía marítima, lo que se traduce en un aumento de costos de los bienes de consumo.

Juan Xavier Sánchez, importador de electrodomésticos, cree que “no existe ningún empresario que pueda asumir el nuevo costo del flete, sin importar el rubro en el que se encuentre, tiene que sí o sí transmitirlo al consumidor. Si la empresa no hace esto, se empobrece”, sentencia.

De acuerdo con Sánchez, antes de este incremento, importar de Asia a Ecuador costaba alrededor de 12.000 dólares incluido el flete, pero ahora el mismo viaje cuesta casi el doble, lo que no permite tener un margen de ganancia al importador.

En el caso de los electrodomésticos el aumento ha sido de alrededor del 15 por ciento. Por ejemplo, antes, una licuadora costaba alrededor de 36 dólares y hoy esa misma licuadora tiene un valor de 46 dólares. En artículos más grandes como un televisor de 50 pulgadas tenía un valor cercano a 450 dólares y ahora vale alrededor de 540.

Algo similar sucedió con otros bienes como las bicicletas, aunque con menor impacto, asegura John Vélez, importador de estos medios de transporte. “El retiro de aranceles para las bicicletas compensó de cierta manera el alto costo de los fletes navieros”, dice. Aun así, Vélez reconoce, que para mantenerse a flote han tenido que incrementar el precio de comercialización. Una bicicleta que antes costaba alrededor de 160 dólares ahora cuesta 180, afirma.

El jefe de análisis económico y comercio exterior de la CCQ, Luis Naranjo, confirma que el incremento del valor de los fletes ya se traduce en un incremento de los precios para los consumidores, no solo de los bienes finales (juguetes, ropa, refrigeradoras, cocinas) sino también de las materias primas, importantes para la producción de bienes, lo que ha generado que también los productos nacionales tengan un incremento de precio.

No obstante, la Cámara de Industrias de Guayaquil, dice que, aunque resulta difícil precisar si las empresas trasladaron los costos a los consumidores, por ahora, se conoce que, mayoritariamente, las empresas habrían absorbido la carga. No obstante, coinciden en que esta situación no es sostenible porque, de mantenerse altos valores de los fletes, “podrían presentarse notorios incrementos de precios a nivel de los bienes y servicios ofertados localmente”.

La CIG señala también que, pese a que se derogó la consideración del costo del flete para el cálculo del recargo arancelario, dicho costo todavía se considera para el cálculo del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a pagarse en las importaciones, además de que un importante segmento de las compras al exterior aún se grava con el Impuesto a la Salida de Divisas (ISD).

UN GOLPE TAMBIÉN PARA EXPORTADORES

Por el lado de la exportación, explica Ribadeneira de Fedexpor, aparte del incremento del costo del transporte, las dificultades se reflejan en la escasez de contenedores, cuando las empresas tienen que esperar por un cupo para poder realizar el envío de sus productos. “Si el periodo se extiende demasiado puede llevar a dañar el producto en el caso de bienes perecibles, o hasta pérdida de negocios, para el conjunto de las exportaciones”.

Asimismo, señala que en el contexto ideal los navíos deberían llegar llenos con importaciones y deberían irse de Ecuador llenos con exportaciones, pero esto no sucede porque el país andino hace más importaciones que exportaciones, lo que genera que los importadores paguen por el envío de su contenedor lleno y también por el costo de enviarlos de regreso vacíos.

Según Ribadeneira, para aliviar esta situación, junto al Gobierno han activado el frente logístico de emergencia. “Por ejemplo, se gestionó la eliminación del flete del cálculo de la base imponible y, actualmente, se busca la exención del ISD para el pago del flete, que, si bien para el fisco no refleja un valor importante, para el exportador brinda un apoyo importante a su liquidez”, añade.

Además, señala que esperan que en “la Ley de Inversiones (pendiente de envío por parte del Ejecutivo) se incluya mecanismos que permitan a los exportadores tener un margen de maniobra para situaciones excepcionales como la crisis logística”.

INCREMENTO DEL COSTO DE LOS FLETES DURANTE 2021 POR PRODUCTOS

Según datos de la Cámara de Industrias de Guayaquil, con base en el Manifiesto de Carga de Ecuador entre 2020 y 2021, el alto costo de los fletes se sintió de sobremanera en el transporte de productos como:

- Poli acetales, ciertos poli éteres y resinas epoxi, en formas primarias (+ 314%).

-Ciertos tejidos de poliéster (+284 %).

- Triciclos, patinetes, coches de pedal y juguetes similares con ruedas (+283 %).

- Artículos y material para cultura física, gimnasia o atletismo (+266 %).

- Ciertos tejidos de algodón (+250 %).

- Frenos y servofrenos, así como sus partes, destinados a la industria de montaje (+239 %).

- Lámparas y tubos de diodos emisores de luz (LED) (+234 %).

- Neumáticos nuevos de caucho, de los tipos utilizados en autobuses o camiones (+233 %).

- Cables de fibras ópticas constituidos por fibras enfundadas individualmente (+229 %).

- Neumáticos nuevos de caucho, de los tipos utilizados en automóviles de turismo (+228 %).

- Insecticidas (+223 %).

- Motocicletas (+222 %).

- Máquinas y aparatos para mezclar, amasar o sobar, quebrantar, triturar, pulverizar, cribar, tamizar, homogeneizar, emulsionar o agitar (+217 %).

- Ciertos tejidos de punto (+216 %).

- Lámparas y demás aparatos eléctricos de alumbrado, para colgar o fijar al techo o a la pared (+203 %).

- Trituradoras y mezcladoras de alimentos, así como exprimidoras de frutas y de verduras, con motor eléctrico incorporado, de uso doméstico (+201 %).