Torneo de Ecuador se reanuda tras agresión a un árbitro en un partido de la LigaPro
El campeonato ecuatoriano de fútbol de 2022 se reanudó el lunes tras una protesta del gremio de árbitros, que se negó el domingo a dirigir partidos en rechazo a la agresión física contra uno de sus miembros.
El torneo se reinició con la victoria 1-0 del monarca Independiente del Valle de visita ante Guayaquil City, por la séptima fecha de la segunda fase, con lo que pasó a liderar las posiciones con 16 puntos.
Los jueces, que no se presentaron el domingo a dirigir tres cotejos de la fecha, resolvieron el lunes suspender su decisión y volvieron a las canchas este lunes.
"Hemos decidido levantar nuestra medida de hecho", señaló la Asociación Ecuatoriana de Árbitros de Fútbol (Aedaf) en un comunicado dirigido a Rogger Zambrano, presidente de la Comisión de Árbitros del organismo rector del balompié nacional.
El juez Alex Cajas fue agredido durante el duelo Macará-Aucas del sábado en la andina Ambato (sur), que terminó igualado 1-1 con ambos goles de penal en los minutos de descuento.
Después de que dictara la primera pena máxima, a favor de Aucas, el colegiado recibió reclamos airados de jugadores y miembros del cuerpo técnico de Macará, cayendo al piso en dos ocasiones.
El preparador de arqueros del plantel ambateño, Héctor Chiriboga, participó en las agresiones y lanzó un puñetazo al colegiado después de ser expulsado. Policías ingresaron a la cancha para proteger a Cajas, quien reanudó el compromiso a pesar de los incidentes.
Ante eso, la Aedaf había decidido no dirigir los cuatro partidos restantes de la fecha.
"Llegamos a un acuerdo de reanudar las actividades el día de hoy", dijo a la prensa local el presidente del gremio, Luis Muentes, previo al encuentro Guayaquil-Independiente.
ENDURECER LAS PENAS
En la nota suscrita por Muentes, la Aedaf informó que conversó con representantes de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) y de la Liga Profesional (LigaPro), integrada por los clubes y a cargo del campeonato.
"Encontraremos las reformas a los estatutos y reglamentos que darán un cambio para mejoras de nuestro fútbol y así poder terminar con la violencia", expresó el gremio de colegiados.
Muentes se ha quejado de la falta de contundencia para castigar la violencia contra los árbitros al aplicarse irrisorias multas de 200 dólares para los agresores.
La FEF y la LigaPro emitieron una carta de compromiso conjunta, en la que volvieron a rechazar "todo acto de violencia que atente contra la integridad de todos quienes son parte del ecosistema del fútbol, y condenan los hechos" ocurridos en Ambato.
También se comprometieron a sancionar con el máximo rigor de la ley "a quienes cometan estos repudiables actos" y a reformar las reglas para que "existan sanciones, deportivas y pecuniarias ejemplificadoras" para los responsables de conductas violentas en los escenarios y para los equipos, que asumirán la responsabilidad por el mal comportamiento de sus hinchas.
Los jueces se negaron a pitar los cotejos del domingo a pesar de advertencias de sanciones contempladas en la ley.
Con el empate en el accidentado partido, Aucas sumó 15 puntos y descendió al segundo puesto, mientras que Macará marcha último con 3 unidades y está en zona de descenso a la segunda división.