Las tres adolescentes que arrasan en el mundo del skateboarding femenino

Las atletas mayores las señalan como las impulsoras de toda una nueva generación más abierta a la participación de las mujeres en esta disciplina.
Redacción Vistazo
La brasileña Rayssa Leal (plata), la japonesa Momiji Nishiya (oro) y la japonesa Funa Nakayama (bronce) posan durante la ceremonia de entrega de medallas de la ceremonia del podio de la final de calle femenina de skate de los Juegos Olímpicos de Tokio.

El podio de skateboarding femenino de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 le pertenece a tres adolescentes, de 13, 13 y 16 años cada una. Momiji Nishiya, Rayssa Leal y Funa Nakayama, son las ganadoras del oro, plata y bronce respectivamente.

Nishiya, procedente de Osaka, Japón, se posicionó como el futuro del skateboarding femenino no solo salta en barandales más altos que ella o hace piruetas impresionantes, sino que cerró el círculo de oro para el país anfitrión, después de que Yuto Horigomem de 22 años, haya ganado la prueba masculina.

Según el Chicago Tribune, la joven señaló que estaba “deleitada” con el triunfo y que iba a pedirle a su madre que le cocine una yakiniku, (barbacoa japonesa) como regalo.

Por su parte, Leal, originaria de Brasil también es la medallista más joven por su país y quien le otorgó una segunda medalla al gigante sudamericano. Rayssa expresó que el skateboarding no define edades ni géneros, sino que “es para todos”. Ella lleva metida en este mundo desde los siete años, cuando captó la atención de los internautas al subir un video donde se la veía vestida de ángel, haciendo un salto, flip por tres escaleras y aterrizaje.

“Ahora podré convencer a todos mis amigos para que salgan a hacer skate conmigo por todas partes conmigo”, dijo Leal.

PIONERAS

Sin embargo, este deporte y la sociedad no siempre han sido tan amables con las mujeres. Leticia Bufoni (28), skater que compitió por Brasil en el mismo certamen, dijo que a sus 10 años su padre le rompió su tabla de skate a la mitad para que no practique.

“Lloré por horas. Creía que las niñas no debían hacer skate porque no había visto a una mujer haciéndolo”, le dijo al Tribune. “Quería ser esa niña que las pequeñitas pudieran mostrarles a sus padres, diciéndoles: ‘Ella puede hacer skate. Quiero ser como ella”.

La atleta Annie Guglia (30) también indicó que el camino no ha sido fácil. Contó que la primera vez que participó en un torneo, cuando tenía 13, tuvieron que crear una categoría solo para ella porque no le permitieron competir contra hombres.

“Y la gané, porque era la única. Hemos avanzado bastante desde entonces”, explicó.

Ambas skaters ven con ilusión una mejor participación para los juegos de París 2024. La patinadora estadounidense Mariah Durán (24) dijo que no le sorprendería que, tras el triunfo de las pequeñas, muchas niñas vayan directo a comprar una tabla de skate.

“Esto va a cambiar todo. Esto es como la apertura de al menos una puerta para que muchas skaters que van a decirle a sus papás que quieren empezar con el skate”, dijo.