Steve Hanke: “Hay que dejar que el dólar funcione solo”

Redacción
Steve Hanke. Profesor de Economía Aplicada de la Universidad Johns Hopkins. Académico del Instituto Cato en Washington DC y director del Proyecto Monedas en Problemas. Foto: Jimmy Negrete Cortesía Diario Expreso

El economista que asesoró la implementación de la dolarización del Ecuador dice que el dinero electrónico es “un juego muy peligroso” que podría empeorar la recesión.

Steve Hanke vuelve a Guayaquil, “la cuna de la dolarización, donde todo empezó”. Se acuerda vagamente del día en que aterrizó en este puerto hace veinte años para hablar con Abdalá Bucaram, entonces candidato a la presidencia, sobre la convertibilidad que estaba impulsando en Argentina junto a Domingo Cavallo, exministro de economía argentino que luego sería asesor del gobierno del PRE. En 2001 Hanke volvió para colaborar con el gobierno de Gustavo Noboa, cuando la dolarización ya estaba en marcha.

Hanke, profesor de Economía Aplicada de la Universidad Johns Hopkins y exjefe del equipo económico del presidente Ronald Reagan, viajaba entonces por decenas de países sembrando la idea de que no era necesario devaluar la moneda, que se podía en cambio, “pegar” la divisa local al dólar mediante un sistema llamado “Caja de Conversión”. Hanke es miembro del instituto El Cato, en Washington DC, donde maneja el Proyecto de Monedas en Problemas, que monitorea las naciones con mayores índices de inflación, y también es el autor del Índice de Miseria. En Latinoamérica, Ecuador está en los mejores puestos de este índice desde que dolarizó, y Venezuela, donde según sus mediciones la devaluación ha causado una inflación de 385 por ciento en 2015, está en el peor puesto.


Gabriela Calderón, del Instituto Cato y Juan
Carlos Diaz- Granados, de la CCG,
organizaron el evento. Foto: José Dimitrakis

Hanke vino invitado a un conversatorio organizado por la Cámara de Comercio de Guayaquil, donde hizo pública su preocupación por los efectos negativos que puede tener el dinero electrónico en una economía que ya está en recesión.

¿No hay duda para usted de que el gobierno va a emitir nuevo dinero con el sistema del dinero electrónico?
Pueden hacerlo, no estoy diciendo que lo van a hacer sino que pueden hacerlo ahora bajo los parámetros de la nueva ley. (Una disposición Transitoria de la Ley Solidaridad para los afectados del terremoto, indica que por un año el Banco Central no debe acatar el Código Orgánico Monetario y Financiero, el cuerpo legal que garantiza que el dinero electrónico sea respaldado con activos líquidos).

¿Cuál sería un escenario posible? ¿Podríamos seguir usando el dólar y esta moneda digital paralela por un período largo de tiempo?
Dependerá de lo que el público haga, y creo que la tendencia será similar a lo que pasó en Zimbabue, ese país superó una hiperinflación en 2009, la gente dejó de usar la moneda nacional y sucedió una dolarización espontánea que luego fue oficial. La economía se estabilizó y empezó a crecer, pero el gobierno quería más flexibilidad para poder gastar más. Hace dos meses anunciaron que iban a emitir dólares de Zimbabue 100 por ciento respaldados en dólares americanos de la reserva del Banco del Desarrollo Africano. Exactamente igual a la propuesta ecuatoriana, con la diferencia de que Zimbabue iba a emitir billetes. Esto causó una gran corrida de depósitos. El objetivo es el mismo del Ecuador, el gobierno quiere gastar más dinero y encuentra la manera de producir dinero, lo que es un juego muy peligroso.

El dinero electrónico asusta al público que ha empezado a retirar sus depósitos, en 2015 los depósitos se redujeron en 10,4 por ciento.

¿La introducción del sistema de dinero electrónico podría tener ese efecto?
Lo que está haciendo el dinero electrónico es asustar al público que ha empezado a retirar sus depósitos, en 2015 los depósitos se redujeron en 10,4 por ciento. En consecuencia, se contrae el crédito. También puede darse el caso de que el gobierno lo use como un medio de pago obligatorio, que obliguen a la gente a recibir dinero electrónico, generando más desconfianza. La gente querrá deshacerse del dinero electrónico canjeándolo con descuento.

El Banco Central ha dicho que será voluntario…
Estamos elucubrando sobre lo que puede pasar, y en Ecuador me atrevo a decir que puede pasar cualquier cosa. Este país sufre una gran incertidumbre de régimen (el clima de desconfianza hacia la inversión que se crea cuando los gobiernos intervienen arbitrariamente en la economía). El gobierno actúa de una forma impredecible, dice una cosa y luego hace otra.

El gobierno dice que la dolarización es una camisa de fuerza que nos hace menos competitivos…
La dolarización tiene dos bondades, una es que disciplina el sistema; otra es que es un sistema automático para ajustar la balanza de pagos. No hay que interferir, no hay que ajustarlo, hay que dejar que el dólar funcione sólo. Al gobierno le gusta hablar contra la dolarización desde una retórica populista. Pero la realidad es que la estabilidad que ha tenido el Ecuador sólo se explica por la dolarización, es la gallina de los huevos de oro. La dolarización ha funcionado bien a pesar de una tormenta de políticas desastrosas. Antes de la dolarización la inflación ecuatoriana se mantenía en dos dígitos, ahora está controlada. El crecimiento económico ha sido positivo.


 El Banco Central ha iniciado una amplia
campaña de difusión para ampliar el número
de usuarios de dinero electrónico, que estima
pueden llegar a los 300 mil este año para
aprovechar el descuento en el IVA.

Pero Perú y Colombia han devaluado, haciendo sus exportaciones más baratas.
Si la devaluación fuera una fórmula para competir, Latinoamérica sería el motor del mundo, y en cambio siguen vendiendo materia prima. Suiza tiene la moneda más fuerte del planeta, en los últimos 100 años se ha apreciado un uno por ciento al año en relación al dólar y tienen un sector exportador inmenso ¿por qué? La moneda fuerte presiona a la industria de manufactura a ser eficiente e innovadora. En cambio en Ecuador todas las regulaciones del gobierno reducen la innovación, los empresarios e industriales con tanta incertidumbre no se atreven a correr riesgos, por eso no son competitivos, no tiene nada que ver con la devaluación. La verdad es que cuando la moneda se aprecia, las exportaciones deben subir.

Pero hay que pagar sueldos en dólares, los costos de producción suben…
Si el Ecuador desregula a la economía –y esto incluye quitar las salvaguardias y permitir la flexibilización de la mano de obra– el sector privado se las arreglará muy rápido para bajar costos. China está apreciando el yuan, Japón apreciando el yen, y le venden a Estados Unidos mucho más de lo que le compran. Los analistas que hacen esas reflexiones, realmente no ven la historia completa en un largo período de tiempo. Si se tiene una moneda fuerte hay que liberar la economía y hacerla más productiva.

Los precios en Ecuador han subido un 50 por ciento en la última década, más del doble que en Estados Unidos…
La inflación sigue siendo más alta de lo que debería. Ahora las cosas han cambiado en América Latina, pero la ideología del chavismo en los últimos diez años realmente ha sido un lastre, y Venezuela es el mejor ejemplo. La inflación no baja más porque la economía no se abre, como se ha abierto en Chile, México, Colombia. ¿Por qué Colombia tiene tan buenos ratings y es tan competitivo? Bueno, veamos cuántos tratados comerciales tiene. Ecuador en cambio, se ha marginado y ha establecido relaciones con economías muy enfermas, Irán, Venezuela, no son amigos recomendables.

Si la devaluación fuera una fórmula para competir, Latinoamérica sería el motor del mundo y en cambio siguen vendiendo materia prima.

Usted defiende la banca “offshore” pero nuestro gobierno condena los paraísos fiscales por no ser éticos…
Eso asume que todas las actividades de la banca offshore son ilegales y no es verdad. Claro que también se dan muchas transacciones ilícitas y lo más interesante es ver la cantidad de políticos que están en los Panama Papers por usar cuentas offshore para esconder dinero mal habido y corrupción. Pero no todas las empresas que tienen cuentas en Panamá han obtenido dinero ilícitamente. ¿Quieren que el dinero se quede en el país? La forma más fácil es bajar el impuesto a la renta y establecer un ‘low flat tax’ (sistema que aplica una tasa única de impuestos a los ingresos de las personas y empresas, que se usa en algunos países de Europa).
 
¿Y qué opina de la propuesta para equiparar impuestos en todo el mundo?
Eso lo impulsa la OECD (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), quieren uniformar los impuestos y eliminar los paraísos fiscales. ¿Para qué? Para que todos puedan subir impuestos, de eso se trata. Estoy en total desacuerdo. La competencia de impuestos es como cualquier competencia, es la forma en que se atrae capital y gente, inversión. Es parte de la soberanía de un país decidir qué impuesto tener.