Nuevo Ministerio de la Mujer: “Es un gran avance porque movimientos de mujeres han solicitado esto por años"
La secretaria de Derechos Humanos, Paola Flores, presentó este lunes, 17 de octubre, dos propuestas de decretos ejecutivos ante el presidente Guillermo Lasso para oficializar la creación del Ministerio de la Mujer y DD.HH., que sustituirá a la actual Secretaría. Esto con la intención de reforzar la lucha contra la violencia de género.
Lasso ya había hecho el anuncio la semana pasada en entrevista con Carlos Vera, pero estos días se concretaría el ofrecimiento o a más tardar en la próxima semana, según informó Flores en entrevista con Vistazo. Esta idea surge tras el femicidio de María Bernal que conmocionó al país y exigió respuestas por parte del Estado.
La funcionaria explicó que el cambio de Secretaría a Ministerio tiene como finalidad dotar más recursos que solucionen los crecientes casos de agresiones hacia mujeres, así como ejecutar la Ley para Prevenir y Erradicar la Violencia de Género.
También adelantó que el Registro Único de Violencia (RUV), que estaba en manos del Ministerio del Interior, pasará a la nueva cartera de Estado el 22 de noviembre.
-¿Cuál es el objetivo de convertir la Secretaría de Derechos Humanos en Ministerio de la Mujer y DD.HH.?
En el momento en que la Secretaría pase a ser un Ministerio de la Mujer y Derechos Humanos se vuelve ente rector de la política pública. Esto es un gran avance porque movimientos de mujeres han solicitado esto por años para dar una respuesta institucional a la aplicación de la Ley Orgánica de Erradicación de la Violencia de Género.
-¿Cuándo se creará el Ministerio de la Mujer y DD.HH.?
Estamos en reuniones con el presidente. Presentaremos dos propuestas de decretos ejecutivos. El primero es que el Registro Único de Violencia que está en manos del Ministerio del Interior pase a la Secretaría de Derechos Humanos. Y el otro se refiere a que la Secretaría pasaría a ser un Ministerio de Mujer y Derechos Humanos.
-¿Por qué es importante que la Secretaría maneje el Registro Único de Violencia?
Nos ayudará a salvar vidas y evitar la revictimización. Dentro del decreto ejecutivo le hemos pedido al presidente que disponga, una vez que se cuente con este registro, que las 22 instituciones que están en el Sistema Nacional para Erradicar la Violencia de Género puedan implementar su metodología y alimentar ese registro.
El Registro Único de Violencia debía estar ya aplicado en el año 2019, 2020, pero no fue así. Ahora hay voluntad política para hacerlo. Junto con el Ministerio del Interior, el Consejo de la Judicatura y la Secretaría de Derechos Humanos hemos diseñado un piloto que será presentado el 22 de noviembre.
-¿En qué consiste el Registro Único de Violencia?
El registro único van a serán fichas que contendrán los datos de las víctimas. Si una mujer sufre violencia física, entonces saldrá en la ficha que fue atendida en el sistema de salud. Eso evitará la revictimización de pasar por otras instituciones contando su historia.
También funcionará como alerta temprana. A través de este sistema sabremos qué mujer está constantemente yendo al sistema de salud y qué tipo de agresiones presenta. Con eso vamos a identificar a la víctima para evitar un posible femicidio.
-¿Cuánto es el presupuesto actual? ¿Habrá un aumento?
El presupuesto de la Secretaría de Derechos Humanos con los proyectos de inversión, con gasto corriente, obedece a 18 millones de dólares. Siendo un Ministerio, sin duda, se tendrá que analizar un nuevo presupuesto y la estructura.
-En cuanto al femicidio de María Belén Bernal: ¿Siguen teniendo contacto con la familia?
Hemos intervenido con los Servicios de Protección Integral (SPI) desde el 14 hasta el 23 de septiembre. Sin embargo, el 21 de septiembre, recibimos un comunicado de la Fiscalía indicando que debíamos mantenernos al margen porque las dos personas, tanto Elizabeth Otavalo como su nieto, se encontraban en el sistema de víctimas y testigos. Por lo tanto, ellos se encargarán de todo su proceso.
Sin embargo, también mandamos un oficio por parte de la señora Elizabeth para que pueda intervenir en el caso la CIDH. Funcionarios de esta institución tendrán una reunión virtual con la señora para cumplir con sus necesidades.
-¿Qué acciones se van a ejecutar para erradicar la creciente violencia de género en Ecuador?
Como es un tema estructural, necesitamos cambios estructurales. Por ejemplo, modificaciones en la estructura de las mallas curriculares de la Policía. Para ello, se ha pedido el acompañamiento de ONU Mujeres, para que no solo tenga enfoque de Derechos Humanos, sino también de género.
Así mismo, desde la Secretaría pedimos capacitaciones permanentes a nivel del Ejecutivo: Ministerio de Educación, Ministerio de Salud, Deporte, etc. Para que todos los funcionarios a nivel nacional se capaciten y tengan enfoque de derechos y género.
-Eso a nivel educativo, pero ¿Qué acciones se tomarán concretamente para ayudar a las mujeres violentadas?
Hemos decidido fortalecer cada casa de acogida y cada centro de atención a mujeres víctimas de violencia. Se va a aumentar el presupuesto para estos hogares. Hay muchas casas que el año anterior se quedaron fuera y es imperioso contar con esas aliadas estratégicas dentro de los territorios ecuatorianos. Nosotros tenemos convenios con 22 casas y centros de acogida, pero ampliaremos la cobertura a 26.
También estamos reforzando los 45 Servicios de Protección Integral (SPI) que existen a nivel nacional. De enero a agosto de este año, hemos realizado 42.407 atenciones a víctimas de violencia de género e intrafamiliar.
-¿Cuál es la función de estos equipos?
Dar una respuesta rápida y oportuna a las mujeres víctimas de violencia, no solo en casos de violencia intrafamiliar, sino también cuando hay desastres naturales o crisis penitenciaria. Estos servicios dan atención psicológica, trabajo social y apoyo legal.
También, responden a las necesidades que tienen las juntas cantonales, que no tienen la capacidad o equipos para dar asistencia psicológica. Entonces, mandan a las víctimas a la Secretaría de Derechos Humanos para que tengan sus terapias psicológicas. En otros casos también hemos salvado vidas.