Horas antes de que el Gobierno liderara un encuentro por la seguridad, ocurrieron tres crímenes en Esmeraldas
Una serie de crímenes ocurrieron el pasado viernes en la provincia de Esmeraldas. Un joven de 16 años fue asesinado mientras esperaba que su sobrina salga de la escuela en el cantón Quinindé. Más tarde, un sujeto resultó herido en un atentado hacia un precandidato a la alcaldía de Esmeraldas.
Janio Quiñónez García llegaba todos los días a un establecimiento educativo. Mientras esperaba que su familiar salga de las clases, decidió caminar por el sector. Se quedó parado en la esquina de la institución, cuando de pronto llegaron unos individuos en moto y le dispararon varias veces.
Pese a que la víctima intentó refugiarse en una vivienda cercana, murió de manera inmediata en la vereda. Padres de familia y vecinos del lugar trataron de ocultarse para no ser alcanzados por las balas.
Agentes especializados recolectaron cerca de ocho indicios balísticos y revisaron cámaras de seguridad. Se desconocen las causas del asesinato.
Más tarde, un empleado del Municipio de Esmeraldas resultó herido en su hombro tras un atentado que iría dirigido hacia el concejal Miguel Ruiz Quintero, quien también es precandidato a la alcaldía de la ciudad.
El edil se dirigía a una reunión con dirigentes barriales en el sector Gatazo. Allí lo habrían estado esperando tres sujetos en un taxi, al verlos llegar, procedieron a disparar. En el vehículo iban guardaespaldas y otras personas.
Las balas impactaron en el parabrisas y ocasionaron siete perforaciones en la lámina de blindaje, según indica El Universo. El herido fue trasladado a un hospital y actualmente se encuentra estable.
La Policía llevó al conductor del taxi, quien habría sido retenido por los criminales.
Centro Democrático, partido del concejal, rechazó este acto delincuencial y exigió al Gobierno que garantice la protección para los candidatos.
El mismo viernes en la noche, un joven de 22 años recibió disparos en el muslo izquierdo por robarle una motocicleta en Quinindé.
Todos estos actos ocurrieron horas antes de que se instalara una mesa de seguridad con el ministro del Interior, Patricio Carrillo, y varias autoridades de la provincia de Esmeraldas.
“La solución a la inseguridad no es más policías. Lo que necesitamos es construir un verdadero sistema con estrategias que nos ayuden a contener lo que estamos viviendo y prevenir los impactos que podrían venir”, dijo Carrillo.