Guillermo Lasso pidió al Presidente de Estados Unidos más cooperación en materia defensa
El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, pidió a su colega de Estados Unidos, Joe Biden, profundizar la cooperación en materia de defensa, informó la Secretaría General del Comunicación de la Presidencia.
En un comunicado, la Secretaría señaló que en la reunión bilateral dialogaron sobre los retos de la región, especialmente ligados a la lucha contra las estructuras criminales trasnacionales.
En la cita, Lasso "formalizó el pedido de profundizar la cooperación en materia de defensa, para lo cual habrá un nuevo encuentro de los equipos de trabajo en los próximos días", reza el escrito.
El pedido lo realizó en Estados Unidos, desde donde Lasso retornó este sábado luego de haber participado en la Cumbre de las Américas.
El Gobierno de Lasso se ha embarcado en una campaña por combatir la inseguridad y para ello, el pasado 29 de abril, se decretó el estado de excepción en las provincias Manabí, Guayas y Esmeraldas ante el alto índice de violencia en las zonas.
El Gobierno de Ecuador informó, además entonces, que destinó una partida de 11,5 millones de dólares para reforzar la seguridad en la ciudad costera de Guayaquil (suroeste), capital de Guayas.
Estas decisiones se enmarcaron en la creciente violencia que se vive en el litoral ecuatoriano protagonizada por bandas criminales organizadas enfocadas principalmente en el narcotráfico y algunas con vínculos con carteles de la droga de México y Colombia, según apuntan las autoridades ecuatorianas.
Escenas como la aparición de personas decapitadas o los asesinatos de sicarios se han vuelto cada vez más frecuentes en las provincias costeras, principalmente alrededor de Guayaquil, capital de Guayas, cuyo puerto es utilizado de trampolín para la cocaína producida en países vecinos.
Este fenómeno también tiene un sanguinario capítulo en la crisis carcelaria de Ecuador, donde casi 400 presos han muerto en los dos últimos años en distintos enfrentamientos entre este tipo de bandas rivales que se disputan el control interno de las prisiones.