El último rastro de Pablo Aguirre, joven ecuatoriano desaparecido en Canadá
La última vez que Marina Jácome, madre de Pablo Aguirre Jácome, supo de su hijo fue el domingo 30 de enero de 2022. Desde entonces han pasado 10 días de su desaparición en Montreal.
Según Marina, ese día habían conversado a las 11:00 y quedaron en charlar de nuevo a las 13:00, pero esto no fue posible porque el joven de 22 años ya no contestó su teléfono.
Ese día, la mujer pensó que su hijo estaba cansado y se había quedado dormido. Insistió al otro día y tres días después, pero tampoco tuvo respuesta.
En una entrevista con El Comercio, Jácome contó que durante la semana en la que desapareció su hijo, él había estado en casa recibiendo clases en línea y no salió de casa.
Y según sus compañeros de departamento, el joven de 22 años no había sido visto en la cocina desde el jueves 27 hasta el domingo 30, cuando se contactó con su madre.
Por lo que su madre presume que desde el jueves su hijo no estaba comiendo, lo que la hace sospechar de un posible un colapso porque esa semana la temperatura era de 30 grados bajo cero, así que se mantuvo encerrado.
El día de su desaparición, Aguirre salió del departamento y le dejó las llaves al dueño de casa, contó la madre. Le había dicho que estaba cansado del encierro y que quería respirar un poco. Pero no volvió.
Una vez que se difundió información, la mujer recibió una llamada de un argentino, quien aseguró que lo vio botado en una zona de difícil acceso, una especie de pozo con mucha nieve, detalla Jácome. El hombre le habría preguntado si quiere que lo lleve a una clínica, pero el joven le pidió que lo lleve a una estación del metro. Así lo hizo.
Según el Argentino, Aguirre no llevaba mascarilla, gorro ni guantes, pese al frío. Además, contó que lo vio con la chompa azul marino con filos blancos y pantalón negro, que llevaba cuando salió de su casa.
Por los relatos de la madre se conoce también que una mujer lo vio en la ruta 41 del metro, a las 07:00, y otra que lo vio esa misma fecha en la ruta 55.
En entrevista con el medio digital, Visionarias, Jácome dijo que pudo tener acceso a la computadora del joven, en la que constató que el Instagram de Aguirre se abre con dirección en Ottawa, en la provincia de Ontario, fuera de Montreal (Quebec), donde vivía y estudiaba el joven. "Pero la realidad es que él no ha salido" porque ese día testigos lo vieron en Montreal, dice la progenitora.
Jácome pide al Gobierno de Ecuador que le ayude en la búsqueda de su hijo porque asegura que la Policía canadiense no le ha prestado mucha ayuda. "Talvez el Estado pueda poner investigadores, un detective. Ya son 9 días que Pablo está desaparecido en un clima de menos 30 grados”, dijo la madre.