El kiosco de una mujer fue violentado y saqueado en Quito por segunda vez
Desde hace 35 años, Marta Yumbay vendía diferentes bocadillos en su kiosco ubicado cerca a la Contraloría General del Estado en Quito. Sin embargo, este viernes, 24 de junio, vivió un desgarrador momento, al evidenciar que manifestantes destruyeron su negocio y robaron los productos que no pudo llevarlos a casa.
En un video difundido en redes sociales se observa a la mujer, de 65 años, llorando al ver que su puesto fue vandalizado por segunda vez, puesto que un hecho similar ocurrió en las protestas del 2019.
En aquella ocasión también destruyeron su única fuente de ingresos, por lo que hizo un préstamo que aún no acaba de pagar.
“Yo sola he trabajado para mis tres hijos. A mí nadie me ha ayudado, nadie me ha colaborado, he tenido que ser padre y madre para mis hijos”, dijo entre lágrimas a la cadena Teleamazonas.
Yumbay narró que se llevaron mercancía, vitrinas, trastes y absolutamente todo lo que tenía invertido. En total, más de 800 dólares.
“Hice un préstamo y todavía estoy acabando de pagar. ¿Cómo voy a pagar si no tengo de dónde?”, preguntó la anciana.
El Municipio de Quito, a través de la Secretaría de Desarrollo Productivo, comunicó que el kiosco será reconstruido en coordinación con la empresa Tritubot.
Así mismo, decenas de personas han ofrecido ayuda para que doña Marta vuelva a tener su fuente de trabajo.
El ministro de Inclusión Económica y Social (MIES), Esteban Bernal, publicó que buscarán a la vendedora para que recupere su negocio. “Estos actos vandálicos son la muestra de la intolerancia, la perversidad”, acotó.